Aunque la lavadora es un invento que indiscutiblemente nos hace la vida más claro, a veces le tenemos miedo cuando toca aclarar determinadas prendas. Los tejidos más delicados corren peligro si no los lavamos con el cuidado necesario, dando como resultado ropa encogida o estropeada.
Ahora que llega la Navidad, es momento de sacar la mantelería fina y ponerla a punto para adornar la mesa de cara a las comidas y cenas de estas fiestas. Y uno de los tejidos más habituales en esta materia es el hilo.
El hilo es una tela hecha a partir de fibras naturales de la planta de hilo y, si proporcionadamente es muy resistente, incluso es delicada. Esto no quiere opinar que esté prohibido introducir prendas de este tejido en la lavadora, pero sí habrá que asimilar cómo hacerlo para evitar que nuestro mantel encoja, pierda su brillo o la viveza de sus colores o proporcionadamente que se arrugue en exceso.
Paso a paso para aclarar un mantel de hilo en la lavadora
1
Es importante no mezclar las prendas de hilo con otras de otros tejidos a la hora de lavarlas en la lavadora.
2
Escoge un software para prendas delicadas, que sea de ciclo corto y sin centrifugado.
3
El lavado ha de realizarse con agua fría, como mayor a 30ºC.
4
Usa detergente y suavizante especiales para prendas delicadas y quia añadas recuelo, ni siquiera para un mantel blanco. En ese caso, mejor vinagre de desinfección.
5
Talego el mantel de la lavadora tan pronto como termine el software de lavado. De lo contrario, se arrugará mucho más.
Cómo aclarar un mantel de hilo a mano
Si no te fías de la lavadora, siempre puedes aclarar tu mantel de hilo a mano. Es menos cómodo, pero te aseguras que no habrá errores indeseados que acaben en desastre.
Para ello, llena un balde con exuberante agua fría y un detergente para prendas delicadas. Introduce el mantel y déjalo a remojo durante media hora. Si tiene manchas concretas, frótalas suavemente con un cepillo de cerdas suaves, pero quia restriegues el mantel sobre sí mismo.
A posteriori, acláralo muy proporcionadamente. Si quedan restos de detergente, podría dejar marcas una vez seco. Cuando lo vayas a tender, evita estrujarlo para escurrirle el agua, pues lo arrugaría demasiado.
Cómo agostar y planchar un mantel de hilo
El hilo y la secadora son enemigos irreconciliables, ya que el calor excesivo daña sus fibras y encoge las prendas. De modo que deberás colgarlo en un tendedero tan estirado como sea posible, a fin de compendiar las arrugas.
Si tu mantel es blanco, puedes tenderlo al sol. De lo contrario, mejor evitar la incisión directa de los rayos para que no se deteriore el color.
Para plancharlo correctamente, deberás hacerlo cuando aún está levemente húmedo. Así te resultará mucho más claro. Aunque el hilo suele soportar proporcionadamente altas temperaturas del vapor de la plancha, es conveniente probarlo primero en una punta para comprobar si deteriora el tejido y así ajustar la temperatura.
Publicar un comentario