Thiago Messi, el hijo longevo de Lionel Messi y Antonela Roccuzzo, es a sus 10 primaveras el inclinado número 1 de la albiceleste y, horas ayer de la final del Mundial que medirá este domingo a Argentina y Francia, su religiosa difundió a través de su cuenta de Instagram el particular mensaje que el pequeño envió a su padre y a toda la selección: la transcripción de su puño y composición de la popular canción Muchachos con la que los aficionados argentinos apoyan a su combinado.
La canción, un clásico del fútbol argentino con una composición adaptada a la ocasión, hace precisamente narración a Leo Messi y al desaparecido Diego Armando Maradona, los dos referentes de la apego argentina, sin olvidar a las víctimas de las Malvinas. Palabra incluso de las "finales que perdimos" de Argentina, aunque como poco del pasado.
Thiago no sólo ha transcrito la composición de la canción, que los aficionados de la albiceleste cantan tanto en las calles de todo el mundo como en los estadios donde se disputa el Mundial, sino que adicionalmente la ha compostura con la bandera Argentina de fondo.
Aunque la composición comienza con un patriótico "en Argentina nací", el hijo longevo de Messi y Roccuzzo nació en Barcelona en noviembre del 2012 y, hasta que su padre fichó por el PSG la pasada campaña, siempre ha vivido en Castelldefels.
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