Los Mossos d'Esquadra detuvieron este jueves a Lluís Gros, en exploración y captura y condenado a 23 abriles de prisión por abusos sexuales, prostitución, corrupción de menores y exhibicionismo, tras una citación del youtuber y periodista Carles Tamayo al 112 advirtiendo de su posición en un centro médico del suburbio de Vallcarca, en Barcelona.
La detención ha supuesto el capítulo final del reportaje de Tamayo sobre la investigación del caso Gros y la demostración de la "impunidad" de la que gozaba el detenido, del que asegura habría estado dando clases a menores pese a su condena.
Detención del pederasta Lluís Gros
"Al final, su ego y su narcisismo son lo que le han hecho entrar en la mazmorra" asegura Tamayo, tras confirmar que el mismo imputado -al que conoce desde pequeño- fue el encargado de pedirle la elaboración del documental y que durante la elaboración del mismo le confesó que pretendía fugarse a Marruecos.
"Hoy hemos estampa la última suceso del documental, ha podido nominar entre buscar su delito y pedir perdón a las víctimas; o intentar huir de la neutralidad y voltear la cara de nuevo a los chicos abusados… Ha estimado la segunda", ha publicado Tamayo en sus redes.
Tamayo asegura que pese a la condena por abusos estaba impartiendo clases a menores
El pasado mes de noviembre, el Tribunal Supremo confirmó la condena del detenido, el cual lleva presentando diferentes posibles para sortear su entrada en prisión. Finalmente, el 26 de abril, las autoridades le dieron un plazo de 15 días para formalizar su ingreso en el centro penitenciario, al que no acudió. Tras su detención, está previsto que este viernes pase a disposición legal.
Lluís Gros curia por propasarse sexualmente de varios menores entre 2007 y 2011 en un cine del Masnou (Maresme) tenía una empresa que gestionaba el cine La Calandria del Masnou y el cine del Foment Mataroní y contrataba los jóvenes, de 13 a 16 abriles aproximadamente, para repartir publicidad de los establecimientos o trabajar en el bar y las taquillas.
El tribunal le condenó a cuatro abriles de prisión por exageración sexual con penetración, 17 abriles por delito continuado con dos víctimas más, y dos abriles y ocho meses por prostitución y corrupción de menores, con una multa total de 8.400 euros.
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