Siempre serán recordados los pasos de Sálvame a Informativos Telecinco, en los que algunos de sus colaboradores lanzaban mensajes de llos más variopintos a Pedro Piqueras para dar por terminada la difusión del Tomate. Sin confiscación, lo que se vivió este jueves preciso antaño de comenzar Ya son las ocho, ya es historia de la televisión.
¿Se imaginan que los colaboradores abandonen el plató cantando y bailando para acoger a Sonsoles Ónega y su Ya son las ocho? No se lo imaginen y sigan leyendo, porque fue ver para creer. Tanto es así que la periodista casi tiene un percance en directo por desliz de las prisas por comenzar su software. Parece que este año Telecinco, y en concreto sus programas vespertinos, tienen mala suerte en lo que a incidentes se refiere.
Los colaboradores de 'Sálvame' abandonan el plató entre cantes y bailes
La tarde del jueves en Sálvame estuvo dedicada en gran parte a analizar la tercera publicación de la Sálvame Fashion Week: los mejores momentos, incluido el descuido de María Patiño enseñando un pecho o la caída de Chelo García-Cortés rompiéndose la muñeca, pero además hicieron un desfile inédito que no pudo realizarse la tenebrosidad mencionado por desliz de tiempo.
El desfile en cuestión lo denominaron ‘Experimentalismo’ y estaba dedicado a la moda sostenible con trajes diseñados por Daniel Davilla y basados en materiales reciclados al 100%. Al ser prendas tan delicadas y con materiales tan frágiles, el Davilla pidió a las colaboradoras que no se sentarán para no arrugarlos, de ahí que las reconvertidas modelos de pasarela decidiesen darse el plató de Sálvame cuatro minutos antaño de la hora.
Terelu Campos despidiendo 'Sálvame' preciso antaño de 'Ya son las ocho'
Cuatro minutos en directo y en televisión es mucho tiempo y más cuando el posterior software, Ya son las ocho, y su presentadora, Sonsoles Ónega, todavía no estaban preparados. Pero eso no importa si hablamos de Sálvame, porque las colaboradoras en medio del pasillo de Telecinco decidieron cantar y cabriolar al ritmo de la canción Ríe y llora de Celia Cruz mientras llamaban a Sonsoles Ónega. De hecho, Terelu Campos regresó al plató y, mirando a cámara, explicó a los espectadores a qué se debía ese surrealista momento.
Sonsoles Ónega llega apresurada para presentar 'Ya son las ocho'
“Lo que está pasando es que no tenemos la cámara que se pira mochila para salir del plató y como no se pueden sentar y estamos cansados de ayer han nacido corriendo. No llegas nunca a las ocho de la tarde Sonsoles, hija de mi vida, llega ya de una vez”, decía la presentadora. “Pero por fin Ya son las ocho, hasta mañana”, daba paso Terelu preciso cuando Sonsoles Ónega se encontraba con los colaboradores de Sálvame, incrédula en presencia de lo que estaba pasando.
“¿Pero qué hora es?”, preguntaba Adela González. “No lo sé, no llevo cronómetro”, respondía Sonsoles. “Que ya son las ocho”, gritaban los colaboradores de Sálvame mientras seguían bailando al son de Celia Cruz con ganas de marcharse a casa. “Adiós, buen software”, le decía Adela a Ónega mientras esta buscaba a Prestigio Camila, que debutaba como reportera en su software.
La accidentada entrada de Sonsoles Ónega en el plató de 'Ya son las ocho'
Sin confiscación, preciso al entrar al plató de Ya son las ocho, Sonsoles sufría un pequeño percance: casi se cae al suelo. “Uy, Todopoderoso mío, no te digo que ¡me mato! Esto es muy resistente, de verdad, como Chelo García-Cortés. Voy a entablar a pensar que algunas cosas son verdad”, espetaba la presentadora a punto de caerse y haciendo remisión a la especie de “maldición” que parece ocurrir caído sobre Sálvame con tres accidentes en pocas semanas.
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