Laura Borràs se mantuvo ayer fiel a su discurso combativo en su postrero acto como presidenta del Parlament. Ya advirtió en la víspera que aquellos que la quisieran eliminar “me tendrán que matar y ensuciarse las manos”. Era lo que buscaba. Por eso se negó a dimitir a pesar de que sabía que la votación de la Mesa del Parlament la tenía perdida al haberse dictado un pleito hablado por presunta corrupción y ser ello incompatible con el reglamento de la Cámara. Prefirió que el PSC, ERC y la CUP votasen su suspensión y así poder encasillar de “jueces hipócritas” a los miembros de estos partidos en la Mesa.
Más allá de la osadía de su discurso, el itinerario político de Borràs debería circunscribirse a esperar el pleito que tiene irresoluto y que el tribunal dilucide si es culpable o no. El problema para la estabilidad de la política catalana es que Borràs es, por otra parte, presidenta de Junts, y habrá que ver cómo reacciona este partido delante la caída de su dirigente. El propio president Pere Aragonès tuvo que salir ayer al paso para aclarar que ningún miembro de Junts en el Govern le había planteado ningún tipo de crisis y que se sigue trabajando “con la misma confianza” de siempre.
Laura Borràs en su comparecencia de ayer tras ser suspendida como presidenta del Parlament
Es posible que el conflicto de ayer sea un punto de inflexión en Junts para que Jordi Turull consolide algunos aspectos de la nueva política que ha empezado a esbozar para su formación desde que fue preferido secretario caudillo. Ello pasaría por, una vez superado el episodio de ayer, mantenerse en el Govern e iniciar una nueva etapa en el partido menos condicionada por la influencia de Borràs. Pero podría ocurrir asimismo lo contrario y que el discurso procesista de la expresidenta del Parlament acabe contagiando al partido y lo tiro a posiciones más maximalistas.
En aspecto del debate vivido en la ejecutiva de Junts y los pocos apoyos ciudadanos que suscitó la protesta convocada ayer delante el Parlament, nos inclinaríamos a concluir que la primera opción parece más factible. Junts debe escoger cuál debe ser su camino.
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