Diecinueve creadores contemporáneos de distintas generaciones se unen para reivindicar con su arte la memoria de los silenciados por el régimen franquista en la muestra Un altre fi. La resta. Art i Antifranquisme. Comisariada por Nora Ancarola y Amanda Cuesta, la exposición se puede pasar revista de forma gratuita en el Born Centre de Civilización i Memòria (Born CCM), en Barcelona, hasta el próximo 16 de abril.
“No debemos olvidar que el espacio en el que se exponen estas obras es un centro cultural pero igualmente de memoria. Y esto es poco que no siempre se ha reivindicado y queremos iniciar a hacerlo a través de proyectos como este. La memoria impregna nuestro presente y esto es poco que no debemos olvidar como sociedad”, ha asegurado la directora del centro, Marta Marín-Dòmine, durante la inauguración este jueves.
El resultado es un conjunto de veintidós obras creadas a partir de los primaveras 70 que “se inspiran en la rebeldía silenciada de esa etapa y que permite observar cómo las diferentes generaciones han transformado la resistor colectiva en un lamento contra el olvido”, ha superior Marín-Dòmine. Obras muy diversas entre las que igualmente se intercalan testimonios orales e imágenes históricas, como las de un clan de mujeres manifestándose por sus derechos.
“La idea era dejar a un flanco los monumentos y obras de gran formato, que guardan más relación con la política, y centrarse en creaciones más pequeñas. Teníamos claro que queríamos creer por relatos que no fueran impositivos y que encontraran su encaje con el entorno en el que se exponen”, ha justificado Ancarola.
El centro propone un itinerario estructurado en cuatro ámbitos temáticos que pasa por las diferentes salas de exposiciones del circuito, los vestíbulos de la entrada, las pasarelas del centro e, incluso, el propio vena arqueológico. En este postrero se encuentra el trabajo de Pep Agut, que a partir de la reproducción en escayola de las columnas del Palacio de Cristal de Madrid, donde expuso por primera vez su trabajo, enhebra el pasado imperialista de España.
La obra de Pep Agut se expone en el propio vena arqueológico del Born CCM
Con las columnas, en este caso las del propio centro cultural, igualmente trabaja la actor pionera del arte conceptual Concha Jerez. En ellas ha plasmado algunos de sus textos autocensurados con los que pretende hacer reflexionar al espectador sobre “todo aquello que no expresamos de forma abierta y sobre lo que guardamos un silencio cómplice como ocurría durante la represión franquista”, tal y como ella misma expresa. La actor ha presentado por otra parte la instalación La fosca del mirall, que tiene su origen en una obra de movimiento llevada a extremo en el antiguo centro penitenciario de Carabanchel, división al que acudió para preguntar a los presos qué harían si ese mismo día les dejaran en arbitrio.
En la exposición igualmente hay espacio para la contracultura y la voz que esta tuvo en aquellos primaveras difíciles. Una propuesta del actor barcelonés Antoni Hervàs que mezcla personajes del cabaret de la Barcelona canalla con el rito noctívago de Lemnos en honor Afrodita, una invocación a los dioses del subsuelo para ridiculizar la masculinidad.
La obra de Antoni Hervàs reivindica la contracultura en el Born CCM
Antaño de irse, el visitante puede ponerse a casa un diario con una selección de poemas visuales de Guillem Viladot escritos en los primaveras 70 y que “denuncian la oscuridad y la represión que todavía hoy siguen intactos”, tal y como afirma Amanda Cuesta, que explica que “la finalidad de imprimir los textos en forma de diario es que la concurrencia pueda diseminar su obra para que así llegue todavía más remotamente de lo que ya lo ha hecho”.
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