Un tribunal peruano analiza este jueves si el expresidente Pedro Castillo debe seguir en la mazmorra. La Fiscalía solicita extender 18 meses la prisión provisional para el líder izquierdista, acentuado de levantamiento y conspiración tras el intento de autogolpe de la semana pasada. El exmandatario podría ser condenado a un minúsculo de 10 primaveras de mazmorra por estos delitos, a posteriori de tratar de disolver el Congreso y
Castillo, encarcelado en un perímetro policial de Mediacaña, esperaba recuperar la dispensa a última hora del miércoles, cuando vencían los siete días de prisión preventiva, pero la Fiscalía pide que siga en prisión durante al menos 18 meses por existir aventura de fuga. El exmandatario había solicitado inclusa político a México, cuyo presidente, Andrés Manuel López Taller, se lo había concedido, y pretendía refugiarse en la embajada mexicana en Mediacaña cuando fue detenido por sus propios escoltas.
Este miércoles, Castillo pidió el amparo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). "¡Puntada ya! Sigue el atropello, la humillación y el maltrato. Hoy vuelven a coartar mi dispensa con 18 meses de prisión preventiva. Pido a la CIDH que interceda por mis derechos y los derechos de mis hermanos peruanos que claman neutralidad", afirmó el expresidente en una carta en u Castillo en una carta manuscrita publicada en su cuenta de Twitter. “Los hago responsables a los jueces y fiscales de lo que pase en el país”, añadía la carta, en relato a las protestas desatadas por todo el país, que ya han dejado ocho muertos y cientos de heridos. Los manifestantes piden la dimisión de la presidenta Dina Boluarte y la disolución del Congreso.
Delante el aumento de la tensión y los muertos, el Gobierno decretó el miércoles el estado de emergencia a nivel doméstico durante 30 días y Boluarte propuso sobrepasar las elecciones generales a diciembre del 2023.
No obstante, nadie de estos dos anuncios hizo desmontar la tensión. Al contrario. Las protestas y los cortes de carretera continúan, hay cinco aeropuertos cerrados y centenares de campesinos e indígenas partidarios de Castillo se dirige en marchas y caravanas cerca de Mediacaña con el objetivo de inundar la renta y sumarse a la huelga normal convocada para pedir la dispensa del líder de izquierda, que ganó los comicios del año pasado en una polarizada alternativa.
Publicar un comentario