El cuidado del rizo es imprescindible para suministrar una correcta higiene. El pelo necesita tratamientos específicos para conservarlo de modo saludable e hidratado. En el mercado existen diferentes tipos de productos capilares en función de la tipología del rizo: llano, ondulado, rizado… Y incluso distintos tratamientos según las evacuación del mismo: caspa, descamación, dermatitis seborreica, atópica etc. A veces, el cuero melenudo puede picar, inflamarse o incluso aparecer eccemas o escamas que acaban por desprenderse y caerse. La aparición de estas molestias normalmente suelen ser síntomas de afecciones capilares.
Qué es la caspa
La caspa es la aparición visible de células muertas en el pelo que son producidas por un hongo. Aparecen con pequeñas concentraciones de escamas amarillas o blancas de textura grasienta. Encima de aparecer en el cuero melenudo, puede aparecer en otras partes del cuerpo como las cejas o la barba. Entre sus síntomas más frecuentes se encuentra el picor o comezón del cuero melenudo. “Es la consecuencia de una sobresalto del funcionamiento del cuero melenudo y pueden distinguirse dos formas clínicas: sequía y seborreica” se afirma desde un estudio publicado en Elsevier. La caspa sequía se presenta con escamas blancas y se cae con cada peinado. La caspa seborreica, en cambio, tiene escamas más amarillentas.
¿Y la descamación?
La descamación aparece cuando se produce una regeneración de las células del cuero melenudo que se manifiesta a través de pequeñas escamas blancas. Suelen ser secas y en ocasiones su presencia va acompañada de picores. La principal diferencia con la caspa suele darse visualmente con el color. Las escamas suelen ser de un amarillo más intenso que en el caso de la caspa seborreica.
Tratamiento
Para tratar la afección de la caspa se recomienda utilizar champús específicos según su tipología. En el mercado existen una gran variedad de productos que ayudan a aliviar y frenar su sintomatología y a frenar su exposición estética. Eso sí, es recomendable la reconocimiento a un dermatólogo que valore con exactitud el problema y diagnostique un tratamiento específico.
Prevención
Los expertos recomiendan tener un estilo de vida saludable para evitar, en la medida de lo posible, estas afecciones. Transigir una dieta saludable rica en alimentos variados y practicar deporte con regularidad son claves. Además es aconsejable demarcar el uso de secadores y planchas que dañan el pelo, limpiar el rizo con agua muy caliente o evitar situaciones que puedan provocarnos estrés y ansiedad.
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