Sébastien Loeb (Hunter BRX) al fin tuvo su día de goce en el Dakar 2023 en la cuarta etapa. A posteriori de un puesta en marcha catastrófico en esta cuarta tirada saudí del rally, el francés nueve veces campeón del mundo de rallies WRC se resarce con su primera trofeo, la número 17 que logra en su séptima décimo. Se impuso por solo 13 segundo sobre su paisano Stéphane Peterhansel (Audi). No hay cambios sustanciales al frente de la normal de coches.
Al Attiyah, al frente
El qatarí sólo cedió 16 segundos a Carlos Sainz, por lo que sigue siendo el líder de la normal
La cuarta etapa del Dakar 2023, en los alrededores de Ha'il (425 km de distinto cronometrada), vio aparecer la arena en la ruta luego de dos días de piedras, borrasca, tormentas y riadas. En coches, el desenlace de la viaje fue una venida prácticamente al sprint entre los grandes favoritos al tuareg.
Se impuso Loeb con 13 segundos de delantera sobre Peterhansel, con Carlos Sainz (Audi) tercero a 1m50s del triunfador, y pegado, un Nasser Al Attiyah (Toyota), que minimizó las pérdidas cediendo 2 minutos al francés y solo 16 segundos al gachupin, por lo que el qatarí sigue siendo el líder sólido.
Inicio catastrófico
En dos etapas, el francés se dejó más de hora y media con Al Attiyah, acribillado por los pinchazos
Sébastien Loeb, el interminable solicitante al tuareg (ha sido dos veces 2.º y una 3.º) para completar un palmarés único, ha vivido un inicio de Dakar calamitoso, sobre todo por los pinchazos. En la etapa 2 del lunes perdió 1m26m (fue 59.º) al sufrir tres pinchazos, mientras que en la etapa 3 de ayer cedió 37 minutos más al vencedor, por lo que acumulaba un retraso en la normal de 1 hora y 35 minutos con Al Attiyah, en el puesto 28.
La trofeo le permite avanzar hasta el puesto 14 provisional, a una hora y 33 minutos del qatarí. Sus opciones de optar al tuareg siguen siendo muy escasas... si no hay una catástrofe de sus rivales.
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