Andrés Manuel López Taller recibió el apoyo que esperaba el mes pasado en la consulta popular sobre los tres primeros abriles de su "sexenio" presidencial (2018-2024). El presidente mexicano logró cero menos que el 92% de los votos -eso sí solo el 20% del electorado participó-, y registró su índice viejo de popularidad de su presidencia, el 66,7% en un tienta realizado en marzo.
Es un porción de apoyo espectacular dada la dureza de la pandemia y una crisis económica que ha engrosado aún más las filas de la pobreza. La crematística mexicana no creció en los tres primeros abriles de la presidencia de López Taller.
El problema de AMLO no está en las calles y cantinas, sino en las sedes empresariales
El problema para el presidente -que se conoce como AMLO- no es la opinión pública en las calles y las cantinas sino la de las sedes empresariales y mediáticas, tanto en México como Washington, Bruselas o Madrid. Sin olvidar la ciudad petrolera de Texas, Houston. En estos centros globales de poder, hace meses que se lleva a punta una ataque contra los planes del gobierno de reforzar el estado mexicano como vertebrador de la crematística en sectores estratégicos. Para los defensores de la globalización, López Taller es culpable del delito de "nacionalismo de bienes".
En el sector más clave de todos, la energía, el contra ataque a los planes de López Taller para reanimar a las dos grandes empresas estatales, la petrolera Pemex y la eléctrica publica Comisión Federal de Electricidad (CFE), acaba de cosechar su primera trofeo.
El plan de ley impulsado por el partido de AMLO, Morena, con el fin de acortar el poder de las eléctricas multinacionales, varias de ellas españolas, y ampliar la cuota del mercado de la CFE, acaba de ser rechazado en el Congreso. No logró las dos terceras partes de los votos necesarias para los cambios de la constitución que la ley requiere. La derrota –que AMLO calificó como "traición"- se produce tras una intensiva campaña contra la ley en Estados Unidos y Europa.
El plan de ley que trataba de acortar el poder de los monopolios eléctricos se estrelló en el Congreso
La ley rechazada habría rescindido los contratos en los que 34 plantas privadas -la mayoría gestionadas por multinacionales europeas- venden electricidad a la red franquista. Habría calificado de "ilegales" a 239 otras plantas privadas que venden energía directamente a clientes corporativos en México que luego se hacen dueños de la planta generadora, en una ejercicio conocida como utilitario abasto.
La votación es una derrota simbólica para el fogueado líder de la izquierda. Pero tal vez lo más sorprendente para muchos votantes de AMLO, los que se identifican con la causa medioambientalista- es el hecho de que su gobierno haya optado por defender un maniquí de producción energética basada en combustibles fósil. Mientras, Washington y las multinacionales eléctricas privadas defienden el cambio de matriz energética en auxilio de las energías renovables. Casi todas las plantas que el gobierno quiere excluir usan fuentes de energía renovables o gas natural frente a los combustibles fósiles más contaminantes, como el fueloil, utilizados por la CFE.
"Para el gobierno, la energía es un sector clave y el estado debe controlarlo; esto tiene prioridad sobre la diversificación de la matriz energética", dijo José Luis de la Cruz, director de Instituto para el Expansión Industrial en Ciudad de México. "La reducción de emisiones, en la ejercicio, no es prioridad".
La establecimiento Biden se ha mostrado hostil al plan de ley de AMLO
La establecimiento de Biden ha arremetido contra el plan de López Taller porque obligaría a empresas estadounidenses instaladas en México a comprar energía sucia, lo que frustraría sus intentos por acortar la huella de carbón. "La reforma propuesta por el gobierno mexicano perjudica a la inversión estadounidense y puede obstaculizar los esfuerzos conjuntos entre Estados Unidos y México relacionados con las energías limpias y el clima", afirmó, unos días antaño de la votación, la secretaria de energía estadounidense, Jennifer Granola.
La CFE -cuyo director universal, Manuel Bartlett, es el ex ministro de gobiernos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) calificados como la "mafia del poder" por AMLO- dice que pretende modificar en renovables y alcanzar un 35% de energía renovable en el 2024. Pero "sus finanzas débiles van a impedir que lo haga", dijo Pamela Starr, de la consultora estadounidense Monarch Strategies, en una mesa redonda del think tank Inter-American Dialogue, en Washington. "La CFE no tiene bienes financieros para realizar nuevas inversiones", coincide de la Cruz.
El plan de centralizar en Pemex todo el refino de petróleo ha creado polémica al otro banda de la frontera
Al mismo tiempo, el plan de AMLO, de reforzar a Pemex y refinar todo el petróleo mexicano en instalaciones nacionales, o en refinerías de propiedad de Pemex en EE.UU., ha encaramado ampollas en la renta texana de Houston. Pemex causó una esforzado polémica al comprar el año pasado la histórica refinería de Shell en Deer Park, un toque muy simbólico en un estado que fue despojado de México tras la trofeo del Universal Sam Houston contra el ejército mexicano en la batalla de San Jacinto, de 1836. A fin de cuentas, esta misma batalla se representa en un enorme mural hiperrealista pintado en los depósitos de la refinería.
La adquisición ha permitido a López Taller reivindicar el representante del icónico presidente Lázaro Cárdenas, que nacionalizó la industria petrolera mexicana en 1937, expropiando a empresas como la Standard Oil y Royal Dutch Shell. Pero difícilmente se puede considerar un logro para la seguridad energética mexicana controlar una refinería ubicada en Texas que mantiene una dependencia de importaciones desde EE.UU.
La descuido de bienes ha impedido al gobierno reforzar el comprobación de Pemex
La construcción de otra nueva refinería en Las Bocas, en el estado de Tabasco, es una postura más coherente por el petro-nacionalismo y la soberanía energética. Pero el elevado coste de la refinería -ya presupuestado en 12.000 millones de dólares, un 50% más de lo que se previa- ha frustrado los planes del gobierno, de modificar más en Pemex, la petrolera más endeudada del mundo. Eso si AMLO ha rematado acortar el exageración tradicional de Pemex como fuente de financiación de un estado mexicano históricamente despilfarrador al acortar los derechos que la petrolera paga al estado del 70% al 45% de su facturación.
La valor de AMLO, de dar marcha antes en la concesión de campos petrolíferos en el vagabundo de México a multinacionales petroleras, ha desatado aún más indignación en Houston. "Es un plan de vanidad. Nadie se beneficia menos él y para Houston conlleva problemas de seguridad y medioambiente", dice George Baker, autor de un boletín sobre el sector petrolero en Houston.
En Wall Street y Houston inquieta que el plan de AMLO viola las cláusulas de desenvuelto competencia
Pero, más que una defensa del medioambiente, lo que inquieta a Wall Street y Houston puede ser que el plan de AMLO viola las cláusulas de desenvuelto competencia del nuevo acuerdo de desenvuelto comercio de Norteamérica, T-Mec. Tras brindar el mercado energético al renta extranjero por primera vez con la reforma energética del ex presidente del PRI Enrique Peña Nieto - un software radical de privatización y liberalización diseñado en colaboración con consultores estadounidenses-, AMLO se ha atrevido a dar marcha antes. "Lo que molesta es lo que llaman el creador cremallera, que una vez abierta no la puedes retornar a cerrar", dijo el director de un diario crematístico en Ciudad de México.
Entran en coyuntura factores geopolíticos además. Washington se ha mostrado cada vez más preocupado por el nacionalismo de bienes energéticos de AMLO en un momento de elevada incertidumbre sobre las fuentes de gas y petróleo dada la posible retirada del suministro ruso.
La negativa de Mexico a sumarse a las sanciones contra Rusia, irrita a Washington
La negativa de México a sumarse a las sanciones contra Rusia es otro motivo de irritación en Washington. La valor del partido Morena de crear un comité de amistad con Rusia ha caído muy mal. Andrés Oppenheimer, el columnista latino más próximo al sección de Estado de Biden, calificó como "patética" y "de la izquierda jurásica" la negativa de López Taller a sumarse a las sanciones. "El sillar de EE.UU., Europa y Japón (...) será cada vez más inobediente a servir de países de los que no puede firarse en un ámbito político", advirtió Oppenheimer, en el Miami Herald.
Pese a todo, López Taller no ha tirado la toalla en la batalla por la energía. En el sector petrolero, el Gobierno ha expropiado una empresa de exploración, Talos, de sede en Houston, que, tras la liberalización de Peña Nieto, había sido adjudicado un campo en el Tuno de México con producción potencial equivalente a 10 millones de dólares al día.
En el sector eléctrico, aun sin el apoyo de la nueva ley, el presidente "no va a dar más licitaciones (...) utilizará el entorno lícito para restringir el sector privado y esa incertidumbre inhibirá a las propias empresas a la hora de modificar", dijo de la Cruz. "El utilitario abasto es un fraude y es ilegal; no puedo hacerme la pinta gorda porque luego seria cómplice", dijo AMLO, en su conferencia mañanera, el lunes.
México obligará además a que las reservas de litio sean explotadas por el Estado
Acaba de anunciar además que los depósitos de litio en el desierto de Sonora -esencial para la fabricación de las baterías en la crematística de cero emisiones -deben ser explotados por el estado y no el sector privado. "No puede acaecer concesiones a intereses privados y muchos menos extranjeras", dijo el presidente. Se estudiará rescindir el acuerdo de la empresa china Ganfeng Lithium.
López Taller siente que la neutralidad está a su banda. Ha denunciado relaciones endogámicas entre los gobiernos anteriores y las multinacionales del los sectores eléctrico, petrolero y construcción. La española Iberdrola, por ejemplo, fichó al ex presidente Felipe Calderón y la ex secretaria de energía Georgina Kossel para incorporarlos al consejo de su filial estadounidense.
La suntuosa residencia del hijo de AMLO en Houston persigue al presidente
El nacionalismo de bienes de AMLO ha creado motivos para despabilarse escándalos más o menos reales para atacar al presidente. Uno de ellos se escenifica precisamente en Houston. Una investigación periodística sobre una suntuosa casa en la renta petrolera estadounidense, residencia entre agosto de 2019 y julio de 2020 del hijo del presidente, fue laborioso a principios de año por los adversarios políticos y mediáticos de AMLO para proyectar sospechas sobre un posible delito de trafico de influencias.
El supuesto escándalo, conocido ya como la "Casa Corriente", un inmueble en las alrededores de Houston, de superficie de 450 metros cuadrados y piscina olímpica, provocó un pequeño desgaste de la popularidad del AMLO en enero, cuando un foto reportaje sobre la casa en Houston fue publicado por el medio digital mexicano estadounidense Latín US y la oenegé Mexicanos contra la corrupción y la impunidad (MCCI). Se desató una serie de acusaciones de que la casa de su hijo contrastaba con los constantes llamamientos a la moderación de López Taller. El escandalo acaparró los títulos mediáticos y fue laborioso por los partido de la competición como el PAN, que hasta contrató una maqueta de la casa aburrido en desconocedor adentro del Congreso. Pero desde entonces, el asunto ha aparecido de los medios y la popularidad del presidente ha vuelto a sus niveles anteriores.
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