En un Primero de Mayo normalizado, los sindicatos mostraron plena sintonía con el Gobierno que se combinó con duras críticas a la CEOE y advertencias de que la conflictividad profesional está asegurada si no hay pacto sobre la subida de los salarios. La amenaza está servida.
En Madrid, la tradicional manifestación transcurrió por fin sin restricciones por la covid, acertadamente acompañada por un sol más que primaveral y con una reivindicación primordial: el aumento salarial para compensar a los trabajadores por la pérdida de poder adquisitivo que provoca la inflación disparada. Una demanda de los manifestantes, que fueron más de 50.000, según los sindicatos, y solo 10.000, según la Delegación del Gobierno.
Sindical
CC.OO. y UGT muestran plena sintonía con el Gobierno y celebran los acuerdos alcanzados
De entrada, tocó mostrar sintonía con el Ejecutante y celebrar lo conseguido. “Estamos cambiando la faz de este país”, dijo Pepe Álvarez, secretario genérico de UGT. “La crisis de la pandemia se saldó con unos niveles de corresponsabilidad entre el Gobierno y los agentes sociales sin precedentes”, remachó Unai Sordo, secretario genérico de CC.OO.
Los dos sindicatos presumieron de los 13 acuerdos sociales alcanzados, que incluyen la reforma profesional, los ERTE, la ley de los riders , la del teletrabajo o la reforma de las pensiones. Todo más dócil con un Gobierno de izquierda plural, reconoció explícitamente Pepe Álvarez.
Una sintonía que se vio reforzada por la presencia de cuatro ministros. Dos con derecho a sitio destacado en las declaraciones previas a la manifestación, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la Portavoz y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, adicionalmente de los titulares de Educación, Pilar Alegría, y de Consumo, Alberto Garzón.
Pero el Primero de Mayo que, sin pleito en Ucrania, hubiera podido dedicarse a ensalzar los buenos resultados en la creación de empleo indefinido de la reforma profesional, tuvo que centrarse en la venidero reivindicación, el aumento de los salarios. Y aquí, los sindicatos cargaron contra la patronal avisando de que, si no hay acuerdo, se van a tensar las negociaciones de los convenios.
Aquella corresponsabilidad mostrada durante la pandemia, ahora brilla por su marcha. Es la interpretación que hacen los sindicatos del aislamiento de la CEOE al Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) y que motiva sus advertencias.
“Las organizaciones sindicales vamos a impulsar un proceso de movilización creciente entorno a la negociación de los convenios colectivos. No puede ser que las organizaciones empresariales pretendan no mejorar los salarios y que la crisis la paguen los trabajadores. No lo vamos a tolerar y ese es el mensaje fuerza de este Primero de Mayo”, dijo Unai Sordo, de CC.OO.
“Hay que aumentar los salarios de los trabajadores para que no pierdan poder adquisitivo con la flagrante situación de inflación”, añadió Pepe Álvarez, para añadir que este Primero de Mayo es el momento “para tomar aliento y seguir delante”.
Cambios
Yolanda Díaz anuncia que empieza a preparar el Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI
A la patronal asimismo le enviaron otro aviso, que no aceptarán modificaciones en la prevista revalorización de las pensiones en función de la inflación. Unai Sordo recordó al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, su frase de que del acuerdo de la reforma profesional “no se toca ni una coma”, para aplicarla ahora a la reforma de las pensiones. Aquí, siquiera se toca lo que se acordó, subrayó el líder sindical.
La vicepresidenta Yolanda Díaz aprovechó la manifestación para divulgar un anuncio. Que en los próximos días se comenzará a elaborar “la gran reforma del derecho castellano, el Estatuto del Trabajo del siglo XXI”. Una vez concluido con éxito el primer objetivo de su tarea, como era la reforma profesional, ahora el segundo es esta modificación de la norma del mercado de trabajo. Se prostitución de adaptarlo a la sociedad flagrante y a los desafíos tecnológicos actuales, con “el agradecimiento de nuevos derechos de los trabajadores propios de la sinceridad económica, social y profesional flagrante”, según se especificó en el software del Gobierno de coalición. Es lo que ahora se pondrá en marcha con un primer paso que será la constitución de una comisión de expertos.
Por su parte, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, sintetizó la etapa en cuatro cifras: 20 millones de ocupados, medio millón de contratos indefinidos, mil euros de SMI y 16 semanas de permiso de paternidad. Cuatro cifras que dijo “demuestran que mereció la pena este esfuerzo de Gobierno de coalición y las reivindicaciones de cada Primero de Mayo”.
La de Madrid fue la más numerosa de las 70 manifestaciones convocadas en distintas ciudades españoles bajo el divisa “La decisión: subir los salarios, contener precios, más igualdad”. Tres objetivos, pero con los sindicatos muy centrados en el primero de ellos y en las negociaciones con la CEOE que, una vez pasado el Primero de Mayo, tienen que retomarse. Las dos partes se fueron de Semana Santa con posiciones muy enfrentadas y desde entonces no ha habido contactos.
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