Los conductores que circulan por las calles de la ciudad actualmente tienden a apañarse alternativas de movilidad eléctricas que sean cómodas, eficientes, fáciles de manejar y, a poder ser, con un diseño singular. El Microlino, un microvehículo producido por la marca suiza con el mismo nombre, parece cumplir con todos estos requisitos y expectativas, lo que ha llevado a que más de 30.000 personas hayan mostrado su interés en adquirirlo antiguamente incluso de que se haya puesto oficialmente a la traspaso.
Este amable microcoche totalmente eléctrico comparte espíritu con el BMW Isetta y se inspira en el diseño de este bubble car de los abriles 50, pero con un música mucho más novedoso y toda la tecnología actualmente adecuado incorporada. Encima, tanto los medios que lo configuran como su producción y manejo son respetuosos con el medioambiente.
El transporte, calificado de cuadriciclo pesado L7e y que en España requiere el permiso B para conducirlo, tiene capacidad para dos ocupantes. Claridad especialmente la atención la puerta de entrada delantera, un paso especialmente pensado para las grandes ciudades, que se convertirán en su hábitat natural.
Hasta tres alternativas de depósito
La traducción de tirada estará adecuado con una transformación de 10,5 kWh
Según el fabricante, el Microlino no es propiamente un coche, sino la mezcla perfecta entre una motocicleta y un transporte de cuatro ruedas. Tiene unas medidas de 2,52 m de holgado, 1,47 m de orgulloso y 1,50 m de stop, y cuenta con un maletero de 230 litros, una signo mínimo desdeñable para un coche de un tamaño tan limitado como éste.
El microvehículo se impulsa por un motor eléctrico de 12,5 kW que le permite alcanzar una velocidad máxima de 90 km/h. Se ofrecerán tres capacidades distintas de baterías de 6, 10,5 y 14 kWh. Sin requisa, la traducción de tirada, que saldrá al mercado este verano, sólo estará adecuado con la depósito de 10,5 kWh.
La estructura, hecha de arma blanca y aluminio de una sola aposento, es robusta y resistente y aporta rigidez y estabilidad al transporte. Según el fabricante, es más segura y vanguardia que el chasis tubular utilizado por otros fabricantes de microcoches. Todos sus medios han sido combinados para dar un peso al transporte de 435 kg (sin baterías).
Proporciones
Tiene una largura de 2,52 m de holgado y cuenta con un maletero de 230 litros
De estética minimalista, al frente y en la parte trasera una tira de luces LED le cruza de flanco a flanco. Por adentro, dispone de todo lo necesario para que la conducción sea cómoda e incorpora la más moderna tecnología de infoentretenimiento y sonido.
Aunque en un principio se puede obtener solamente en Suiza tras una preserva reembolsable de 500 euros, los clientes europeos que deseen su Microlino pueden configurarlo sin tener que hacer ningún suscripción original. La marca afirma que cuando se autorice la entrega en cada país, los interesados recibirán una comunicación para abonar el suscripción original y confirmar así su reserva.
El precio es poco elevado para tratarse de un cuadriciclo y varía según sea el completo. Así, para la traducción Dolce su coste es de 16.390 euros; para la Competición, de 18.650 euros; y asciende a 20.990 euros para la serie Pioneer. El primer Microlino que ya se puede configurar desde la página web de la marca es precisamente de esta última transformación, con una producción limitada de 999 unidades. Mientras estamos a la retraso de poder circular con él por la calle, podemos disfrutar de su vídeo de presentación.
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