Irlanda es tierra de grandes de la humanidades universal como Oscar Wilde, James Joyce, Bram Stoker o Bernard Shaw. Proponemos una escape a hoteles singulares con solera, y por qué no, disfrutar para analizar alguno de sus libros.
Stoker se lleva la palma en cuanto a aniversarios este año, 125 primaveras de la publicación de su magnífica Drácula y 110 primaveras de su asesinato. Por otra parte, parece que en octubre vuelve el Bram Stoker Festival por las calles de Dublín, con el manifiesto disfrazado y demás actividades temáticas.
Nos adentramos en palacios, castillos y abadías convertidos en hoteles por toda Irlanda. Lugares idóneos para trasladarnos a la época media o la época victoriana y disfrutar leyendo obras maestras irlandesas. Aquí van 5 de ellos para hincar el diente a nuestro alucinación irlandés.
En Newmarket
Nos adentramos en el castillo que perteneció a una auténtica grupo gaélica durante muchos siglos, hoy convertido en un espléndido hotel de fastuosidad. Está situado en la costa oeste irlandesa, cerca de Limerick.
El hotel castillo palaciego situado a orillas de un balsa es inspirador. Su entorno romántico nos traslada en el tiempo con gran facilidad. Cuenta con pocas suites de estilo clásico y un toque irlandés encantador. Algunas de ellas con vistas a los bosques colindantes o al hipnotizador balsa.
La experiencia del té de la tarde en el hotel es genuina, con una amplia selección de infusiones, cómo no, servidas en teteras de plata y porcelana fina.
Incluso puedes disfrutar de sus 18 hoyos en su campo de golf, bañarte en su piscina cubierta, relajarte en su sauna o pasear por su hermoso rosaleda.
¿Qué opinan los viajeros? En Booking.com alcanza un 8,9, lo más valorado es el personal, así como el confort. En google llega a los 4,8 sobre 5.
A media hora de Dublín
La sucesivo parada nos conduce a 30 minutos de Dublín en pleno campo irlandés. Se tráfico de un gran edificio de principios del siglo XIX que fue construido como residencia de una adinerada grupo irlandesa, inspirándose en un castillo francés a las suburbios de París.
Su ubicación nos permite revistar la animada Dublín y disfrutar de su hospitalidad. Aunque no hace errata salir de este hotel, su atmósfera romántico, sus habitaciones con largas cortinas hasta el suelo y muebles elegantes de madera nos acercan a épocas pasadas y nos invitan a disfrutar del entorno.
Tenemos la posibilidad de poner al golf en su propio campo, y no sólo eso, puedes mejorar el swing con sus afamadas clases de golf. Cuenta incluso con un interesante y renombrado Spa para relajarte posteriormente de un día intenso.
¿Qué opinan los viajeros? Los usuarios destacan su sitio, confort y pureza, con un 8,9 en Booking.com y un 4,6 sobre 5 en Google
A orillas de un balsa
Nos trasladamos al noreste de Irlanda, a un castillo de ensueño, construido en 1861 a orillas del balsa Eske y que da nombre al hotel. Dispone de 17 hectáreas de campo a su aproximadamente, con paisajes mágicos que puedes recorrer en las bicicletas facilitadas por el hotel.
Esta zona septentrión alberga varios parques naturales como el Parque Doméstico de Glenveagh, siendo un paraíso para los senderistas. Otra opción es recorrer su extraño costa atlántica y disfrutar de la brisa armada. Su spa es otro de sus puntos fuertes y valentísimo para rematar la excursión que decidas.
Sus habitaciones tienen una ornamento contemporánea con mucho estilo y las zonas comunes proporcionan el porte antiguo y señorial de las casas de campo irlandesas. La restauración de su restaurante es un punto resistente de este extensión histórico con productos frescos del salvaje Atlántico.
¿Qué opinan los viajeros? Los viajeros en Booking.com valoran el confort y el servicio con una nota total de 9. Google valora las mismas categorías y una media de 4,7 sobre 5.
En Galway
Si la estancia en castillos y palacios no te seduce tanto, quizá una antigua cenobio te guste más. Es un extensión sin duda magnífico para analizar o releer los clásicos de la humanidades irlandesa. Situada incluso en la costa oeste cerca de Galway y a orillas del balsa Corrib, uno de los numerosos lagos desperdigados por toda Irlanda.
Uno de los atractivos de esta cenobio es cenar en el excelente restaurante The Pullman, formado por varios vagones originales del Orient Express en sus jardines, que conservan la ornamento interior de este mítico tren. Reservar con adelanto.
Sus habitaciones están decoradas con antigüedades y maderas nobles pero sin renunciar a un gran confort. El complicado contiene un campo de golf de 55 hectáreas y ofrece clases de golf. Otras actividades que puedes hacer es tiro al meta, la pesca o la cetrería.
¿Qué opinan los viajeros? Las opiniones destacan las habitaciones y el confort en Booking.com y en Google. En Booking.com tiene un 9,2 sobre 10 y en Google un 4,6.
Del Club Relaix & Chateaux
Finalizamos nuestro periplo por edificios históricos irlandeses con el Park Hotel Kenmare, miembro del selecto club de Relais & Chateaux.
Localizado en el suroeste de Irlanda cerca del mar hasta tal punto que sus jardines descienden hasta la bahía de Kenmare en un precioso paseo. Es un mítico hotel inaugurado en 1897 y que en poco tiempo se convirtió en un clásico para viajeros de todo el mundo.
Sus 46 habitaciones y suites están decoradas de forma individualizada con muebles de época y numerosas antigüedades sabiamente combinadas con el fastuosidad contemporáneo. Casi todas las estancias tienen vistas al balsa o terrazas propias.
Cuenta con un renombrado spa que te permitirá reparar el relax durante tu cita, la propuesta gastronómica es muy recomendable, y por zaguero, destacamos su pequeño cine propio de 16 asientos con palomitas incluidas.
¿Qué opinan los viajeros? Tiene una puntuación de 8,9 sobre 10 en Booking.com y un 4,6 en Google. Lo más afamado es la ubicación, las instalaciones y el confort.
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