El limes marcaba la frontera. A un banda, el mundo romano. Al otro, el circunscripción germánico sobre el que Roma nunca pudo desempeñar un control permanente. El término boreal del Imperio, que actualmente marca la separación entre Países Bajos y Alemania, estuvo vivo hasta cerca del año 260 luego de Cristo, cuando fue negligente a causa del empuje de los bárbaros.
La provincia holandesa de Gelderland es la que más restos de esa época conserva en su circunscripción. Por todos lados aparecen restos en piedra que atestiguan ese limes, claro Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y a lo dadivoso de su trayecto asimismo han aparecido restos de fortalezas y asentamientos, entre otros edificios.
Frontera
La provincia holandesa de Gelderland es la que más restos de época romana conserva
El extremo gran descubrimiento en la zona es un santuario completo y relativamente casto en Herwen-Hemeling (cerca del municipio de Zevenaar) donde se han enemigo restos de ídolos, relieves y yesos pintados. Este templo, el primero hallado cerca de la frontera, es “muy anormal” porque cuenta con altares dedicados a varios dioses y diosas.
En Herwen-Hemeling, los soldados romanos oraron a sus deidades desde el siglo I hasta el siglo IV. Aprovecharon una pequeña elevación en el cruce entre los ríos Rin y Waal y artificialmente la hicieron un poco más entrada para izar al menos dos templos (aunque podrían ser muchos más).
Uno de los edificios era un santuario comunal galorromano con paredes pintadas de colores y un techo de tejas. A pocos metros había otro más pequeño, asimismo con muros bellamente pintados. En él destacan los restos de varias decenas de piedras votivas (pequeños altares) colocadas por soldados de suspensión rango para cumplir un determinado voto.
Las piedras están dedicadas a Hércules Magusanus, Júpiter-Serapis y Mercurio. Adicionalmente, hay un gran pozo de piedra que asimismo puede tener tenido una función distinto ya que cuenta con una escalera de piedra que conducía al agua, según explican en un comunicado los arqueólogos de la empresa RAAP.
Los investigadores neerlandeses asdeguran que, a pesar de que se conocen varios santuarios romanos en los Países Bajos (en Elst, Nijmegen, Empel o Aardenburg), este es el primero que se encuentra exacto en la frontera del Imperio Romano. El santuario de Herwen-Hemeling es, adicionalmente, el más completo hallado en el país y la cantidad de fragmentos de escultura de piedra caliza no tiene precedentes.
Que el sitio haya estado en uso durante siglos es poco que asimismo lo convierte en particular. Y, aún así, piedras votivas, pedestales, un pozo de piedra, partes de estatuas… todo sigue ahí.
El santuario fue utilizado principalmente por soldados, como se puede ver en los muchos sellos de tejas encontrados. “La industria de las tejas era una actividad marcial en ese momento”, indican los expertos. Adicionalmente, se han enemigo muchas partes de jaeces para caballos, armaduras y puntas de lanzas.
Fueron los oficiales de suspensión rango del ejército romano los que erigieron docenas de piedras votivas. Agradecían a un dios o a una diosa por cumplir su deseo. Ni siquiera tenía que ser vencer una batalla. Algunos se conformaban con sobrevivir durante un dadivoso período de tiempo en estas regiones del boreal, muy allí de sus casas.
Los hombres que llegaron hasta Zevenaar e hicieron un sacrificio en sus templos habían estado en Hungría, España y África. “Y se llevaron a sus dioses con ellos...”, explican los arqueólogos. Varias de las obras halladas se exhibirán en el Museo Het Valkhof de Nijmegen a partir del viernes 24 de junio.
Miembros de la Asociación de Voluntarios en Arqueología (AWN) realizaron los primeros hallazgos a finales de 2021. Tras varias semanas sacando arcilla, los especialistas de RAAP llevaron a final una proceder adicional a principios de este año. El sitio no está descubierto al divulgado y está estrictamente protegido mientras duren las excavaciones.
Publicar un comentario