Pakita es un charlatán yaco que nació el 30 de noviembre de 2020 y que se ha hecho virulento recientemente en las redes sociales, sobre todo en TikTok. En esta plataforma su dueño publica los vídeos de su mascota imitando la voz y las expresiones de un tiktoker que se hizo a su vez conocido por hacer unos originales bocadillos y de grandes dimensiones “empapados” en óleo y que han aparecido en millones de pantallas de usuarios.
Los perfiles, que comentan en las redes sociales, afirman reírse mucho con sus vídeos y califican sus tonos de voz como “idénticos” al de la persona que imita lo que provoca sonrisas en el espectador y resulta tener atractivo e incluso le piden a Pakita que aprenda a asegurar ciertas frases y suba vídeos como prueba de ello.
Reacciones
Reconocidos streamers que han reaccionado a sus vídeos en directo calificando de “formidable” las representaciones
Sus vídeos se comparten muchas veces y en poco tiempo alcanzan grandes cifras en cuanto a visualizaciones, lo que ha llevado a Pakita a convertirse en un personaje virulento. Sus vídeos no solo han cautivado a personas anónimas, sino además a reconocidos streamers que han reaccionado a sus vídeos en directo calificando de “formidable” las representaciones de Pakita Yaco.
Esta especie resulta ser un ave psitaciforme (tal y como afirma la RAE: del categoría de las prensoras de pico curvo, colores vistosos y planeo rápido) y es además conocida como Locuaz Sombrío Africano o Locuaz Sombrío de Nalgas Roja correcto a los característicos colores que conforman las plumas que recubren su cuerpo y su trasero.
Estos loros miden rodeando de 30 centímetros de largo y pesan en torno a medio kilo o 400 gramos, pesando los machos poco más que las hembras asiduamente. Pakita actualmente pesa 443 gramos en concreto, tal y como compartió su dueño en la red.
La familia suele nominar los Loros Yacos como animales de compañía porque cogen confianza rápidamente con sus dueños y empatizan sobrado con ellos, encima de tener la capacidad de imitar gran cantidad de sonidos, propiciándoles un atractivo natural ineludible. Esta capacidad para reproducir sonidos propios de los seres humanos viene dada por su singular mecanismo respiratorio que, a pesar de carecer de cuerdas vocales, poseen unos músculos en la tráquea que les permiten realizar esta innovador función.
Sin confiscación, este no es el único aspecto que les concede este talento, según una investigación llevada a término por la Universidad de Nuke, estos loros tienen una estructura cerebral distinta a la de otros animales y mucho más compleja. De hecho, en sus cerebros se encontraron áreas exclusivamente destinadas a la simulación de sonidos.
Suelen nacer a asegurar las primeras palabras a los cuatro meses de permanencia aproximadamente. Pero, hay que tener en cuenta que cuanto antaño empiecen a escuchar los vocablos y términos del jerga, más rápido y más sencillo será para el animal aprenderlos.
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