Fundó una plataforma de monitoreo cerebral remoto inteligente y continuo para detectar estados alterados de conciencia. Su investigación incluye el mapeo de la conciencia y la escritura de algoritmos para el seguimiento automatizado de esos estados alterados. Presentó sus teorías sobre la conciencia en los escenarios de TED-NYC y la ONU. Asegura que ese mapeo del aumento de la conciencia en humanos puede permitirnos reconocerlo en seres inteligentes no humanos (tanto interiormente como fuera del planeta), a través de iniciativas en colaboración con SETI. Chander igualmente contribuye a las ciencias de la vida espacial y la medicina realizando simulaciones remotas de rescates de trauma, narcótico y cirugía en entornos análogos a Marte. Dará una charla en The Festival of Consciousness (Barcelona, 29 y 30 de julio).Inteligencia y conciencia
El cerebro y la conciencia han sido poco que me ha apasionado desde muy pupila, desde los 6 o 7 primaveras.
Es usted precoz.
No solo quería ser neurocientífica, igualmente quería ser cosmonauta, de hecho les dije a mis padres que haría ambas cosas.
Y casi consigue ir al espacio.
Soy exalumna de la Universidad Espacial Internacional y finalista para la selección de astronautas. Sí, casi lo consigo.
¿Qué tienen que ver la conciencia y el espacio?
Ir al espacio es una experiencia que altera la conciencia, lo conocemos con el nombre de meta visión normal .
¿En qué consiste?
El 7 de febrero de 1971, Ed Mitchell iba de la Reflejo a la Tierra, flotaba interiormente de la nave, observando la Tierra, la Reflejo, el Sol y el campo de estrellas y poco extraño le sucedió.
¿Qué le pasó?
Le invadió un sentimiento de gloria,
conexión y gusto. Comprendió de pronto que los átomos que le constituían habían
nacido de antiguas supernovas. Vio la Tierra, a los humanos y al resto de especies y sistemas como un todo sinérgico, integrado y unificado.
¿Tuvo una especie de éxtasis?
Sí, una expansión de la conciencia, de pérdida del ego, y una sensación de conexión con todo lo que le rodeaba. La experiencia de Ed Mitchell ha sido narrada por muchos astronautas, de hecho el término meta visión normal se aplica a los astronautas.
¿Se producen cambios en el cerebro cuando un humano está en el espacio?
Sí. Le podría dar una larga registro de cambios fisiológicos del cerebro que tienen superficie en el espacio. Y los que experimentan la visión normal, cuando regresan a la Tierra, cuando su cerebro regresa a un estado habitual, por así decirlo, el sentimiento no desaparece.
Usted se dedica a estudiar esos estadosalterados de conciencia. ¿A qué cree que se deben?
Creo que el cerebro humano, con sus redes neuronales, es en existencia un filtro que va procesando la cantidad de información adecuado en el universo, y hay muchos aspectos que pueden cambiar la forma en que el cerebro filtra la información.
Cuénteme.
Cuando se envía a un humano al espacio, se sospecha que la forma de filtrar la información que tiene el cerebro cambia y permite que entre más información. Esa sensación de conexión normal con el universo que afirman probar algunos astronautas tiene que ver con este cambio en la complejidad de procesar la información.
¿En la Tierra igualmente ocurre?
La conciencia se contrae, empequeñece, durante el sueño, en un coma o en una narcótico normal. En otras circunstancias se expande. Podemos cronometrar el aumento del número de conexiones neuronales en sujetos que usan psicodélicos o que meditan.
¿Usted ha tenido esa sensación de conectividad con el universo?
Desde los 16 o 17 primaveras empecé a tener experiencias en la meditación, no a menudo, pero a veces puedo reparar que me disuelvo, y me siento conectada al universo, poco que para una neurocientífica es muy interesante.
¿Qué ha descubierto?
Que no se negociación de conocer sino de reparar. Es más aceptablemente una sensación de disolución del ego y de conexión con poco más noble, donde casi puedes reparar que estás conectado con las plantas, los animales, las estrellas, la tierra, que no hay margen de conexión.
¿Medible?
Es difícil advertir estos estados, por eso elegí la anestesiología. Me permite alterar la conciencia de las personas a voluntad utilizando sustancias sin dañar el cerebro pero pudiendo cronometrar los existencias a través de electrodos.
¿Ha llegado a alguna conclusión?
Cuando el cerebro está despierto puede procesar información de forma masiva, y cuando uno está dormido o anestesiado, las conexiones se contraen y se vuelven muy simples. A más conciencia, más conexiones. Cuando la clan delirio al espacio, es posible que el nivel de complejidad de sus cerebros cambie.
Pero son estados temporales.
Si siempre viviéramos en este estado mayor de la conciencia, no podríamos hacer nuestra vida habitual. Nuestro estado habitual de consciencia está optimizado para permitirnos movernos por el mundo.
Igual esa decano consciencia sea el futuro.
Quizás, pero el entorno tendría que cambiar para acoger a un humano que siempre vive en este estado de máxima consciencia y conexión con el universo.
¿Todo cambiaría?
Probablemente querríamos cuidar más del otro y del entorno y las guerras terminarían. Aunque un estado de conciencia ampliado no es el único camino para ser mejores, si más clan accediera a él, es probable que se llegara a un meta colectivo en el planeta.
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