Por primera vez en asaz tiempo, confeccionar el merienda auténtico del FC Barcelona será un quebradero de vanguardia para el preparador. Ingenuo problema para Xavi Hernández, que contará con un enorme pericón de posibilidades en todas las posiciones. La única certeza está en la meta, donde Marc-André ter Stegen se mantiene indiscutible. Por lo demás, el gran nivel al que han rendido en pretemporada las nuevas incorporaciones y la variedad de capital en cada fila hacen de la afiliación titular del Barça una clavo en la semana en la que da manifestación la Federación.
En defensa hay dos caras nuevas: Andreas Christensen y Jules Koundé. El primero se perdió la puesta en campo del nuevo Barça en el Spotify Camp Nou el pasado domingo, en la goleada al Pumas de Dani Alves (6-0), por problemas cervicales. Sin retención, fue de la partida en todos los encuentros disputados por el equipo azulgrana en la excursión estadounidense y demostró un gran nivel, concediendo solo dos goles en el partido contra la Juventus. Koundé sí pudo participar en la fiesta del Joan Gamper en el que fue su primicia con su nueva camiseta. Si perfectamente no es una muestra suficiente para extraer conclusiones, su calidad futbolística es indiscutible tras sus grandes temporadas en el Sevilla y sus partidos como internacional con Francia.
Koundé durante su primicia con la camiseta del Barça en el Joan Gamper
No obstante, la "vieja custodia" de la trasera del Barça se resiste a ceder en presencia de la presión de los recién llegados. Ronald Araújo parece indiscutible, el sostén del entramado defensivo del equipo, mientras que Gerard Piqué gozó de buenos minutos en el Gamper. Eric García, titular en presencia de Pumas, siempre ha contado con la plena confianza de Xavi y demostró una gran compenetración con Christensen en los momentos en los que formaron pareja durante la pretemporada. Cinco nombres para dos posiciones (a menos que el técnico se aventure a disponer una dirección de tres), todos ellos con las garantías suficientes para exigir su puesto en el merienda.
La competitividad se multiplica en el centro del campo y se eleva exponencialmente en la delantera. Para formar el trío de mediocentros que asiduamente dispone Xavi sobre el contorno de charnela están Sergio Busquets, Frenkie De Jong (si finalmente no acaba saliendo en este mercado de traspasos), Pedri, Gavi, Nico, los recién llegados Franck Kessie y Pablo Torre y un Miralem Pjanic que podría ser recuperado para la causa por el de Terrassa. Por la posición de pivote han pasado esta pretemporada Busquets y Kessie. El capitán se postula como titular en el que podría ser su postrer año en el club. Kessie ha demostrado su despliegue físico y su capacidad de aparición en partidos como el del Olot, por lo que anclarlo como único pivote podría no ser la mejor opción.
Kessié en argumento durante el Joan Gamper
El problema es que por delante, en las dos posiciones reservadas para los interiores, hay saturación. Pedri descorchó la botella del buen fútbol en el partido contra Pumas, con dos goles de bella ejecución y una gran compenetración con Robert Lewandowski. Resulta difícil pensar que uno de los puestos del centro del campo no esté reservado para él. Por el otro se pelearán Gavi, Nico, Kessie o De Jong, ya que Pjanic parte desde muy a espaldas en la disputa por la titularidad tras una temporada casi en blanco y Pablo Torre es una reto más de cara al futuro. En el Gamper el estimado fue Gavi, pero De Jong entró y dejó su impronta en el partido con un gol. Más problemas (en el buen sentido de la palabra) para Xavi.
En lo alto, las posibilidades rayan lo infinito. En las bandas surgen los nombres de Ansu Fati, Ferran Torres, Raphinha, Ousmane Dembélé o, incluso, el de Abde si finalmente no sale cedido. Fati parece plenamente recuperado de su deterioro y dejó buenas actuaciones frente al Inter Miami, donde marcó un gol, o en el clásico. Raphinha y Dembélé, por su parte, estuvieron estelares durante la excursión por Estados Unidos. El brasileño entró con buen pie en el equipo y se entendió a la perfección con sus compañeros de ataque, mientras que el francés fue, indiscutiblemente, el mejor componente de la pretemporada del Barça.
Dembélé y Pedri celebran un gol en el Joan Gamper
Para la delantera, el aventajado es Lewandowski, fichaje hado del equipo que anotó su primer gol en su nuevo estadio en el Gamper y regaló dos asistencias de ensueño. Su presencia podría, incluso, desplazar a las bandas a Pierre-Emerick Aubameyang o a Memphis Depay, lo que reduce todavía más las posibilidades de Ferran de entrar en el merienda con la asiduidad de la temporada pasada.
Sea como sea, el rompecabezas de Xavi es más una congratulación que un problema. Tiene piezas para formar una afiliación muy competitiva y la profundidad suficiente para dar refrigerio a sus jugadores sin que el nivel del equipo se resienta. Descuido por ver la posible incorporación de alguna cara nueva más ayer del suspensión del mercado y la clausura del capítulo de panorama, pero el nuevo Barça tiene mimbres para retornar a pelear en lo más detención del fútbol gachupin y europeo.
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