Triple podio para Rosalía. Motomami ha sido escogido por tres críticos musicales de The New York Times entre los tres mejores discos del año. Dos le otorgan el número 2 y el otro el 3. Por delante de la cómico catalana están Beyoncé (con su disco Renaissance) y Zach Bryan (con American Heartbreak) y en el tercer caso la cómico de Sant Esteve Sesrovires se sitúa por detrás asimismo de Beyoncé y de Grace Ives (por Janky Star).
Para el diestro Jon Pareles, Rosalía consigue de una forma “juguetona e impulsiva” la ruptura estilística, saltando “a través de las Américas y de regreso a España” y presentándose “frágil en un momento e invencible en el posterior”, describe el crítico.
Entre las posiciones 11 y 25, pero sin orden de importancia o calidad, Pareles coloca el Saturno de Rauw Alejandro y Un verano sin ti, de Bad Bunny, así como Tinta y tiempo, de Jorge Drexler.
En la misma segunda posición sitúa Jon Caramanica el Motomami de Rosalía, resaltando que su dilema entre tradición y modernidad ha quedado superado por una disonancia “más profunda”. Rosalía cultiva hoy una “estética futurista que albarca múltiples géneros, épocas y filosofías, creando un libro tan radical y sincrético como cualquiera emprendedor por una superestrella mundial en los últimos abriles”. Caramanica coloca a Bad Bunny en el número 11 de 2022.
La crítica Lindsay Zoladz, que descenso el libro al tercero del mundo en 2022, describe a la autora como “una de las mejores estrellas del pop en el planeta, que mezcla innumerables géneros e influencias culturales para crear su propio mundo sonoro. Rosalía compagina la fanfarronería de su rapero privilegiado con la emotiva intensidad de la epígrafe del flamenco Carmen Amaya, pivotando sin esfuerzo entre extremos estilísticos”. Zoladz celebra igualmente Un verano sin ti como uno de los 25 trabajos más reveladores del año que está cerca de cerrarse.
Encima del de Rosalía, los mejores discos de 2022 son para Pareles el Weather Alive de Beth Orton; los “archivos de Sudán” de la compositora, cantante y violinista Brittney Denise Parks; Nacarile, de Ile; No rules, Sandy, de Sylvan Esso; Hellfire, de Black Midi; Fossora, de Björk; Aethiopes, de Billy Woods; y Waterslide, Diving Board, Ladder to the Sky, de Porridge Radiodifusión.
Jon Caramanica reto –por detrás de Zach Bryan y de Rosalía- por Drake (Honestly, Nevermind), Priscilla Block (Welcome to the block party songs), Beyoncé (Renaissance), Bartees Strange (Farm to table), el espectáculo final del Sound and Fury Festival de Gulch, celebrado el 31 de julio de 2022 en San José (California), 42 Dugg & Est Gee (Last ones left), Asake (Mr. Money with the Vibe) y Bad Boy Chiller Crew (Disrespectful).
Lindsay Zoladz tiene algunas coincidencias con sus compañeros. Por detrás de Grace Ives, Beyoncé y Rosalía vienen Alex G (God save the animals), Florence & The Machine (Dance fever)), Nilüfer Yanya (Painless), Alvvays (Blue Rev), de nuevo los archivos de Sudán, Angel Olsen (Big Time), y Miranda Lambert (Palomino).
Hace pocas semanas, en otro de los grandes periódicos norteamericanos, The Washington Post, el crítico Chris Richards dijo que el concierto ofrecido allí por Rosalía era el “futuro del pop”. “Era difícil imaginar un concierto pop más impresionante, más visceral, más cuidadoso, más deslumbrante que este, y tal vez ese era exactamente el objetivo de la música de Rosalía”, dijo a finales de septiembre. Richards dijo que la cantante de Despechá es una “políglota con una voz paralizante” y “virtuosa”, que “produce su música con gran vigor y tremendo cuidado, poco que demostró con sudor y lágrimas”.
La catalana habría hecho las delicias del cómico pop Andy Warhol. “En algún lado de este cosmos incognoscible, Andy Warhol sonrió”, escribió el periodista.
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