El doctor Vicente Mera, considerado el mejor médico europeo de la medicina contra el envejecimiento, presentará este miércoles el compendio Muchacha a cualquier vida. El método definitivo para una vida larga, saludable y eficaz. El diestro, que ha pasado temporadas en la isla japonesa de Okinawa donde viven las personas más longevas del planeta, ha asegurado este lunes que él practica el método Hara Hachi Bu consistente en no guatar por completo el estómago, sino detener de ingerir cuando se está al 80%.
“El inmovilidad en la provisiones, la gobierno de las emociones, el sueño o el deporte son las claves para calar a ser centenario”, aseveró el doctor Mera. La itinerario recoge siete grandes aspectos vinculados a la salubridad que habría que tener equilibrados para mantenerse jóvenes: la provisiones, el deporte, la gobierno de las emociones, el sueño, la capacidad depurativa, las hormonas y la digestión.
Tomar menos, estar más
En este manual se ofrecen recomendaciones muy prácticas sobre lo que hay que hacer y no hacer, por ejemplo, con respecto a la alimentación. "No hay que prestar tanta atención al tipo de dieta, que hay miles, sino a la cantidad y a la forma en que se distribuye la comida". "Los pacientes me preguntan, ¿pero cómo restringir la ingesta de comida?", explicó. “Yo me fui a Japón para comprobarlo y la respuesta fue muy sencilla: sopa de miso. Un plato con un suspensión nivel saciante”.
Tras ajustar la cantidad viene la calidad. Hay que designar a lo espacioso del día entre alimentos que aporten calorías, los que dan satisfacción y los que dan un plus. Estos últimos serían los 'superalimentos'. “Se manejo de una veintena de 'superalimentos' que debemos introducir en todas las dietas del mundo y que, apartado de calorías, proteínas y satisfacción, te dan adicionalmente capacidad antioxidante, energética y cognitiva”.
Por el contrario, se encuentran los 'antialimentos' (el gluten, los lácteos y la carne roja) de los que “hay que huir porque nos hacen enojar”, aseguró.
Comida saludable 
El doctor ofrece, a través de las experiencias de sus pacientes, poco más que un formulario de cocina saludable. Como él mismo asegura, se manejo de “enseñar al sabido a cocinar porque lo importante no es solo qué ingerir, sino cómo cocinar, dónde comprar los productos y, por extremo, cómo deglutir. Comemos muy mal, rápido y sin masticar”.
Este avezado en medicina contra el envejecimiento hizo hincapié en la importancia de “hacer tanto deporte cardiovascular como de fuerza, porque el músculo consume diez veces más energía que la aceite”.
A este consejo, el doctor lo ha acuñado como el ‘truco del millón de dólares’, es asegurar, cómo perder peso durante la confusión sin hacer carencia. “Mientras dormimos, en función de transformación basal de cada individuo, podemos consumir hasta 400 calorías ya que el músculo necesita esa energía para mantenerse vivo”.
Nunca es tarde
Otros factores que inciden en la capacidad para frenar el envejecimiento es la calidad del sueño. “Lo ideal es amodorrarse 50 horas a la semana, pero si no se alcanza esta sigla hay que asimilar encajarlo y no agobiarse”.
"Los médicos dedicados al envejecimiento situamos la vida en tres categorías: la vida del DNI, la vida de la apariencia física y, en tercer lado, la vida biológica". Esta última la miden con colchoneta en dos parámetros: el nivel de telómeros y la metilación. Por ejemplo, cuanto más cortos sean los telómeros, las secuencias repetitivas de ADN, más vida se tiene.
El sueño es otra de las claves para envejecer perfectamente 
"He llegado a ver a un paciente que tenía controlados los siete aspectos fundamentales de este método y su vida biológica era 20 abriles menos que la de su pareja, cuya vida sobre el papel era la misma". El propio autor del compendio se sometió a esta prueba y el resultado fue una diferencia de 22 abriles a su distinción.
“Nunca es demasiado tarde y siempre se puede mejorar tu vida”. De hecho, "la genética", insistió, "supone un tercio de nuestra vida y los otros dos tercios dependen del estilo de vida".
En este sentido, afirmó que aunque la genética no esté a distinción incluso existe ganancia de maniobra, y "por eso hoy hablamos de metilación", la epigenética, es asegurar, “usted tiene un gen, por ejemplo el del sobrepeso, y puede bloquearlo en función de un determinado estilo de vida”. "El estilo de vida cambia nuestros genes. Si perpetuamos hábitos poco saludables podemos trasmitirlos a nuestros hijos", concluyó.
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