"Los hechos están claros y todo el mundo puede verlos: nadie está atacando a Rusia. Rusia es el asaltante y Ucrania, la víctima de esa acometida", ha defendido hoy el secretario caudillo de la OTAN, Jens Stoltenberg, en respuesta al discurso pronunciado esta mañana por el presidente ruso Vladímir Putin, en el que ha perceptible a Oeste de atacar a su país para quitarle sus "territorios históricos que hoy se llaman Ucrania". "Fue Rusia quien empezó esta querella imperialista", ha replicado Stoltenberg a la novelística del Kremlin. "Putin no puede aventajar: sería muy peligroso para nuestra seguridad y la del mundo firme".
A punto de cumplirse un año del inicio de la querella, la Alianza Atlántica y la Unión Europea han exhibido hoy su "inquebrantable mecanismo" con Kyiv con la celebración de su primer lucha tripartito en la sede de la estructura marcial, a las extrarradio de Bruselas, con una finalidad clara y urgente: acelerar las entregas de armas y munición a Ucrania, aumentar la capacidad de producción de la industria armamentística europea y coordinar mejor sus esfuerzos para estar a la prestigio de la "querella de desgaste" y "batalla abastecimiento" en que se ha convertido el conflicto. "Es cuestión de semanas, no de meses", ha enfatizado Borrell, preocupado porque la ayuda no llegue a tiempo para evitar que Rusia tome preeminencia en este momento crítico de la querella.
El secretario caudillo de la OTAN, Jens Stoltenberg, en el centro, comparece con el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba (a la izquierda) y el detención representante de Política Extranjero de la UE, Josep Borrell (a la derecha) al término de su primera reunión sinalagmático celebrada hoy en Bruselas para crear mecanismos de coordinación que aceleren la aparición de armas y munición al país.
Stolteberg ha "lamentado" el anuncio de Putin de "suspender" la billete de Rusia en el tratado Nuevo Start firmado por Barack Obama y Dmitri Medvédev en el 2010, el postrer pacto de control de armas nucleares que queda en vigor entre este país y Estados Unidos. "Apelo a Rusia a revisar su posición. Más armas nucleares y menos control de armamento harán que este sea un mundo más peligroso", ha apto. Borrell ha hecho una exploración sombrío de las consecuencias del anuncio de Putin. Esta valentía, sumada a la querella de acometida lanzazo contra Ucrania, "es una nueva prueba de que quiere demoler el sistema de seguridad construido desde el final de la querella fría".
Kuleba: "No todo es blanco y desfavorable en el Sur General" pero debe entender que "defendemos reglas que todavía les protegen a ellos"
De la reunión de hoy en Bruselas ha saliente un acuerdo tripartido para que la UE, la OTAN y Ucrania se coordinen para poner en marcha un sistema de compras de armamento "efectivo" que permita objetar a tiempo a las nuevas ofensivas lanzadas por Moscú. "Seamos francos, nadie pensaba que esta querella fuera a durar tanto tiempo", ha admitido el ministro Kuleba, que ha urgido a los aliados occidentales a tomar las decisiones necesarias para aumentar la cantidad de armas y munición que facilita a su país y, sobre todo, la velocidad a la que lo hace.
Esta semana, coincidiendo con el aniversario del principio de la querella, la ONU votará una resolución de condena a la acometida rusa. Todas las miradas están puestas en el voto de ciertos países del llamado Sur General, que incluye a regiones de África y América Latina. Kuleba ha obtuso que la división entre oeste y el resto del mundo sea tan cachas como a veces se transmite. "La situación del Sur General tiene matices, no es todo blanco y desfavorable", ha dicho tras memorar que entre los 143 votos de apoyo que recibió la inicial resolución había países de esta región. Con todo, "es cierto que debemos hacer más para trabajar con los países del Sur General" y hacerles entender que esta querella "no afecta solo a Ucrania, sino a la defensa de reglas que todavía les protegen a ellos. Si no defienden en el caso de Ucrania, ellos todavía estarán en peligro y no creo que sea poco que quieran".
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