Francisco Camps ha vuelto hoy a apuntar a la dirección doméstico del PP como la responsable de contratar con las empresas de la red Gürtel. En su segundo día, y posterior, de testimonio frente a el tribunal que lo juzga en la Audiencia Doméstico, el expresident valenciano ha afirmado que las empresas de Francisco Correa trabajaron con "normalidad" con el PP desde el año 199. E incluso ha señalado que antaño de que fuera preferido president de la Generlaitat Valenciana "nadie pensó que Álfaro Pérez (El Bigotes) estuviese haciendo cero raro, ni el señor Mariano Rajoy, ni yo ni nadie"
Hoy ha contestado a las preguntas de su culto durante dos horas tras replicar ayer a la fiscal que lo acusa der los presuntos delitos de prevaricación y fraude en relación con la contratación irregular de la trama Gürtel para el montaje del mostrador del pabellón de la Comunidad Valenciana en Fitur 2009. En su relato ha subrayado que Special Events, empresa de Correa, ya inició su décimo en actos del PP doméstico en las elecciones municipales, autonómicas y al Parlamento europeo del año 1999. "Las campañas las contrataba el partido a nivel doméstico", ha indicado el exlíder autonómico del PP, que ha resaltado la "normalidad" con la que trabajaban las empresas de la red Gürtel con su formación aquellos abriles.
Ha explicado que el patrón Álvaro Pérez, apodo El Bigotes, además trabajó en actos del expresidente del Gobierno y de su partido Mariano Rajoy
Para ilustrar esa idea, ha explicado que el patrón Álvaro Pérez, apodo El Bigotes, además trabajó en actos del expresidente del Gobierno y de su partido Mariano Rajoy, que, como él, nunca pensó que estuviese haciendo "poco raro". Y, "para comprender lo que estamos hablando", ha hecho narración a una comisión de investigación celebrada en 2018 en el Congreso, donde El Bigotes relató que, en los actos que organizaba Gürtel, él se encargaba "de la luz, de iluminar, de que el tablado estuviera correctamente", y que tenía más relación con Rajoy que otra persona de su equipo, pero no era una "relación de '¿qué pasa, Mariano? ¿Cómo estás, tío? ¿Cómo has dormido?'".
"Es calcado a lo que se hacía para mí", ha incidido el expresident de la Generalitat, que se enfrenta en este querella a una petición de dos abriles y medio de prisión y diez de inhabilitación. Del mismo modo ha inútil que, como dijo El Bigotes, estuviese al tanto de que la trama intentase organizar la bizarría de los premios Grammy Latino en València y ha dibujado a los principales líderes de Gürtel de "utilizar de mala fe el nombre de la Comunidad Valenciana y de la Generalitat".
La boda de este patrón ha vuelto a salir a colación en esta trayecto. Acudió, ha agradecido una vez más, pero lo hizo por un "compromiso del partido", porque se lo pidió el entonces secretario genérico del PP valenciano, Ricardo Costa. "No tiene más historia", ha zanjado.
Y de nuevo ha rechazado la interpretación de los líderes de la trama sobre la creación de la empresa que operó en Valencia, Orange Market: no fue porque les cerrasen "la fuente en Madrid" con la venida de Mariano Rajoy a la presidencia del PP, porque en 2004, año de aquel cambio en el partido, dicha sociedad "sigue trabajando" para la formación "a nivel doméstico". Este querella, el segundo de Gürtel para Camps a posteriori del de "los trajes", del que fue absuelto, se retomará el próximo 21 de marzo con los primeros testigos
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