“Pedro ha impresionado en todas las competiciones de clubs de la UEFA. Divisa”. Así describe el organismo rector del fútbol continental al exbarcelonista Pedro Rodríguez Ledesma. A sus 35 primaveras el infatigable punta canario continúa escribiendo páginas de una carrera repleta de jalones. La última, el haberse convertido en el primer futbolista que ve puerta en todos los torneos europeos por equipos. Lo logró al marcar el martes con el Lazio delante el AZ Alkmaar en la competición más bisoña, la Conference. Su equipo perdió por 1-2 pero ya nadie le podrá quitar ese hito a Pedro.
Siempre fue así. A la chita callando y con las botas marcando. Nadie esperaba que tuviera una trayectoria tan exitosa en el Barcelona y se convirtió en titular indiscutible de una delantera de ensueño anejo a David Villa y Lionel Messi. Casi nadie preveía que tras su salida del Camp Nou tras ocho temporadas su vida futbolística fuera a ser tan duradera y ahí sigue. Triunfó en el Chelsea, que lo compró por 30 millones, se marchó al Roma y ahora está en el Lazio, al cambiar de mandato en la haber italiana. Falta de hacer las Américas en búsqueda de un refugio más calmado ni de averiguar los petrodólares en Arabia Saudí o Qatar. En primera serie, en una muérdago potente como la Serie A y dando erradicación. Mourinho lo rechazó en el Roma pero entonces se marchó huido al Lazio, y ahora es adorado por la inclinación lazial, que pide su renovación. Acaba arreglo este junio.
Incombustible
Instalado en el Lazio tras ser repudiado por Mourinho, la inclinación pide su renovación
En la Champions League metió un total de 16 goles, en Europa League logró 9 y ahora se ha estrenado en Conference. A estos tantos hay que añadir los que logró en las Supercopas de Europa, con el Barça, del 2009 al Shakhtar Donetsk y al Sevilla en 2015. Porque sus goles han servido para mucho. No han caído en saco roto. Tres Champions (2009, 2011 y 2015) de blaugrana, las dos Supercopas referidas además como barcelonista y la Europa League del 2019 con el Chelsea. En esa final se convirtió además en el único en marcar en el partido cardinal de la Champions (Wembley 2011) y de la Europa League, del mismo modo que en 2009 se erigió en el único en meter gol en las seis competiciones que levantó el Barcelona. Su diana en la final del Mundial de clubs 2009 frente al Estudiantes llevó el partido a la prórroga en el posterior minutos y posteriormente Messi haría el gol del triunfo.
Si se cuentan los dos títulos en los que participó con la selección española (Mundial 2010 y Eurocopa 2012) sus trofeos colectivos ascienden a 25. No está falta mal ni mucho menos para un pequeño al que Josep Guardiola hizo comenzar anejo a Busquets y al que no se le presumía un talento específico. Pero sí tiene dos cualidades que le han permitido sobresalir siempre, instinto realizador y capacidad rematadora con las dos piernas. Su gol del martes, de primeras, resume toda su vida futbolística.
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