¿Tu móvil ha pasado por el taller recientemente por un problema en la pantalla pero no has quedado completamente satisfecho con el resultado? No te preocupes, las sustituciones de pantallas originales por otras falsas y de peor calidad son más comunes de lo que deberían. Por eso en este artículo vas a poder conocer unos cuantos consejos para buscar cuándo te han regalado sagaz por liebre.
Yuxtapuesto con la cazos y la cámara de fotos, la pantalla es lo que define un smartphone novedoso. Nos compramos un maniquí u otro, en muchas ocasiones, atendiendo a las prestaciones del display porque el consumo multimedia en las mejores condiciones posibles es lo que hace inolvidable la experiencia de uso de un teléfono. Por ello, cuando nos cambian la pantalla por una de peor calidad lo vamos a notar inevitablemente.
Pantalla
La cámara de fotos, la cazos y la pantalla son los tres utensilios que mejor definen la calidad de un móvil
¿Por qué se usan pantallas falsas?
Como cualquier piedra en el engranaje del capitalismo, el mercado de los teléfonos móviles se mueve por hacienda y las empresas que se dedican a reparar smartphones o algunos de sus componentes no son una excepción. Simplemente muchas de estas empresas de terceros no obtendrían un beneficio de beneficios rentables si dejasen de usar réplicas de peor calidad para sus repuestos.
Cuatro trucos para aprender si te han puesto una pantalla falsa
Cualquier heredero conoce su teléfono móvil (y el rendimiento que puede ofrecer) como la palma de su mano, por lo que algunos cambios derivados de la instalación de una pantalla de peor calidad no suelen producirse desapercibidos. No obstante, para los menos duchos en la materia, aquí van unas cuantas claves a tener en cuenta para entablar a sospechar de que nos hayan instalado un display adulterado tras reparar nuestro terminal.
La dirección del color
Los paneles con tecnología OLED, AMOLED o Super AMOLED que emplean los fabricantes para sus móviles punteros ofrecen siempre colores nítidos, brillantes y vivos. Por el contrario, las pantallas falsas devuelven colores más opacos y oscuros.
Puedes hacer la prueba reproduciendo algún vídeo con el nivel mayor de apoteosis y comparar los resultados con lo que ofrecía tu teléfono antiguamente de la reparación o (la prueba ideal) con otro teléfono idéntico de algún amigo o habitual.
Formación
Las buenas pantallas no limitan sus bondades a la correcta difusión del contenido, todavía están diseñadas para consumir los posibles de tu teléfono de guisa más apto que las imitaciones. En las buenas pantallas cada píxel trabaja de guisa independiente, reduciendo el consumo cuando en la imagen predominan los colores negros.
Tamaño y ajuste
Revisa adecuadamente los bordes de la pantalla de tu teléfono para comprobar que encaja como un manguito con el resto del terminal. Cualquier imperfección o rugosidad debería de hacerte sospechar sobre la posibilidad de que te hayan cobrado a precio de flamante una simple pantalla de imitación.
Precio
Los milagros no existen en el osado mercado. Desconfía de las gangas. Si la diferencia de precio entre instalar una pantalla oficial o otra cualquiera es desmesurado lo más probable es que sea falsa. Decide dónde inviertes tu hacienda, pero con conocimiento de causa.
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