La ministra de Derechos Sociales y Memorándum 2030, Ione Belarra, líder de Podemos, considera que el “gravísimo sentencia de seguridad” que supone el que hayan sido espiados los móviles del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, “conlleva la aceptación inmediata de responsabilidades políticas”.
Belarra no ha puesto nombre a esas responsabilidades, pero, preguntada por la prensa en Córdoba, a donde se ha desplazado para apoyar a la candidatura conjunta de la izquierda en las inminentes autonómicas, solo dijo “he sido muy clara, lo que ha ocurrido es gravísimo y debe conllevar una aceptación directa de responsabilidades, más clara no se puede ser”.
No ha entrado en las motivaciones de ese espionaje, pero considera que es muy oneroso que la revelación provenga de una investigación independiente encargada por el independentismo catalán, pues esto significa que “hemos sido capaces de preverlo”.
Esto, indicó, repercute la responsabilidad de los responsables de “la seguridad del Estado”. Esa aceptación de responsabilidades políticas “es la única modo de que se restablezca la confianza de la ciudadanía en la democracia española”, porque es, a su querella, de “calidad democrática básica”.
Por su parte, la vicepresidenta segunda y líder del espacio de Unidas Podemos en el Gobierno, Yolanda Díaz, colgó un tuit esta mañana expresando su “solidaridad con las personas espiadas y el Presidente del Gobierno”, en el que señala que “es básico que la investigación vaya hasta el final y se depuren de modo ágil y efectiva responsabilidades”, toda vez “es obligación del Gobierno avalar la seguridad”. “La ciudadanía merece respuestas”, concluye.
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