Desde que apareció en el panorama musical, Rigoberta Bandini no ha dejado indiferente a nadie, especialmente tras su himno Ay, mamá, con el que casi consigue ir a Eurovisión. Precisamente de este tema se estrenó el videoclip el pasado domingo, con motivo del día de la hermana. Sin incautación, la disco no ha estado exenta de polémica. La última, la ha destapado la proselitista feminista Nazareth Dos Santos.
Dos Santos ha querido explicar su experiencia. La llamaron anejo a otras compañeras para formar parte del vidoclip, tal y como ella misma explica en un hilo de Twitter. “Querían memorizar escenas en las que enseñáramos nuestros pechos para combatir contra la censura tanto con la romance de la canción como con el videoclip”.
Y así lo hicieron. Nos grabaron un gran número de escenas preciosas: pechos grandes, pequeños. Unos más caídos que otros. Estrías, cicatrices, pezones pequeños, medianos, grandes. Mujeres racializadas, mujeres con un solo pecho. Mujeres jóvenes y mujeres maduras. En síntesis: variedad y sinceridad”.
Sin incautación, aclara, ninguna de esas imágenes llegó a aparecer nunca. “Cuatro días antaño del estreno, nos avisan de que finalmente los pechos no saldrán en el videoclip".
¿Por qué? Al director no le encajan. ¿Qué irónico no? Un hombre decide que los pechos y su variedad no encajan en una canción que dice "no sé por qué dan tanto miedo nuestras tetas", denuncia.
La coartada que les dieron a las activistas, adelanta Dos Santos, es “que se les iba el mensaje”. Poco que no acabaron de entender, pues “l final es lo de siempre, un hombre ha decidido por nosotras cómo se hacen las cosas y, sorpresa, los pechos reales no le han cuadrado, no forman parte de su reivindicación. En síntesis, quería un video atún pero que no pique demasiado, no vaya a ser que moleste de verdad”.
Las reacciones no han tardado en lograr. Si perfectamente Rigoberta no se ha pronunciado por el momento, son muchos los seguidores que se han preguntado por qué esta propuesta no continuó delante y, igualmente, qué se hará con las imágenes grabadas. “No os merecéis ninguna censura”, aseguran la mayoría de los seguidores.
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