Aligerado con la frescura y la acritud del morapio, el salmón apetencia mucho, pero si quieres un sabor menos intenso puedes consumir morapio blanco. No prescindas de este ingrediente, ya que convierte un guiso convencional en uno sobresaliente.
4 lomos de salmón de 150 g 2 vasos de morapio tinto 2 cebollas tiernas 1 puerro 1 diente de ajo Cebollino La ralladura de 1 citrón 2 cucharadas de azúcar Grasa de oliva impenetrable extra 50 g de mantequilla Sal Pimienta negraSalmón con morapio tinto
1. Retira las escamas y las dificultades del salmón. Haz un par de cortes en la piel. Riega con óleo de oliva y salpimienta. 2. Corta las cebollas, la zanahoria y el puerro. Rehoga las verduras en una cazuela con óleo de oliva, remueve y, cuando inicio a tomar color, riega con la medio del morapio tinto y añade agua hasta cubrir. Cuece a fuego medio durante unos 15 minutos y cuela. 3. Reduce en otra cazuela con una nuez de mantequilla y cuando el deducido se haya evaporado casi del todo, añade el resto del morapio y la misma cantidad de agua. 4. Deja someter a la medio y añade la nuez moscada, la ralladura de citrón y dos cucharadas de azúcar. Pasados un par de minutos de cocción, pasa por el colador chino y reserva caliente. 5. Cocina los lomos de salmón a la plancha, primero por la parte de la piel, durante 5 minutos a fuego medio, tapa y cocina 5 minutos más. Dispón los lomos en platos. 6. Reparte la salsa más o menos de los lomos y rectifica de sal y pimienta. Sirve perfectamente caliente con un poco de cebollino y eneldo picado.
Publicar un comentario