El Comunidad de Barcelona ha anunciado hoy que estos días está completando la instalación de sonómetros en 11 puntos críticos identificados de ruido noctívago. Estas actuaciones tienen como objetivo analizar si se supera en tres decibelios los límites permitidos y tras su estudio impulsar medidas para reducirlo.
Los aparatos se colocan en 11 puntos, denominados por el gobierno municipal como Zonas Acústicamente Tensionadas en Horario Noctívago, en diferentes calles y plazas de Ciutat Vella, Gràcia, Sant Martí y Sants-Montjuïc. En concreto, se ponen en las calles Enric Granados, Joaquim Costa, Almirall Churruca, Rogent, Allada Vermell, Nou de la Rambla, la plaza Geroge Orwell, Osca, otras en la Vila de Gràcia, la rambla del Poblenou y el Triangle Lúdic de Poblenou. El pleno de mayo acordó mediante una proposición de ERC realizar estos controles de guisa “urgente” en esta áreas más críticas en horario noctívago.
En la plaza Sant Jaume
Diferentes entidades vecinales se manifiestan hoy contra el ruido excesivo
“El ruido es una problemática muy importante en la ciudad que tenemos que afrontar sin oportunidad a dudas”, ha explicado este jueves Eloi Badia, el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica del Comunidad de Barcelona. Ha progresista que tras las mediciones se trabajará a partir de julio con los vecinos, restauradores y comerciantes a través de planes de función que cada distrito elaborará.
“Las medidas se adaptarán caso a caso porque se dan dinámicas muy distintas en esta zonas”, ha añadido el concejal. Por ejemplo, algunas de las propuestas que ha resuelto serían trabajar con agentes de mediación, inspecciones de horario a las actividades de restauración, presencia de la Gendarme Urbana, conseguir los horarios de saneamiento, en algunos casos cambiar el horario de las terrazas o dar subvenciones a los vecinos para aislar ventanas.
Uno de los sonómetros que ha instalado el Comunidad de Barcelona
El Consistorio hace este anuncio acoplado en el día en que diferentes entidades vecinales de distintos barrios de Barcelona se manifestarán esta tarde en la plaza Sant Jaume contra el ruido y la ocupación desmesurada del espacio sabido. Fuentes municipales destacan que el ruido es el segundo autor ambiental que más impacta en la vitalidad de la población, acoplado por detrás de la contaminación del éter. Según datos de la Agència de la Salut Pública de Barcelona, un 57% de los barceloneses se exponen a niveles igual o superiores a los que la OMS considera “perjudicial”.
La instalación de sonómetros forma parte del plan de medidas de contaminación acústica 2022-2030 que incluye una serie de actuaciones para minimizar el ruido en la ciudad. No solo se centrarán en el ocio noctívago sino que, por ejemplo, se identificarán a los vehículos más ruidosos por lo que el Comunidad incluso probará un sistema de radares acústicos para detectarlos.
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