Un total de siete mujeres y dos hombres juzgan desde este lunes en la Audiencia de Valencia a Jorge Ignacio P.J., procesado de la homicidio de Marta Pelado, Arliene Ramos y Lady Marcela Vargas y de intentarlo con otras ocho mujeres más en el periodo de 15 meses, desde verano de 2018 hasta el 7 de noviembre de 2019, vencimiento en la que falleció la última de las víctimas y cuyo cenizas no ha sido aún localizado. El procesado presuntamente introducía a sus víctimas cocaína de adhesión pureza vía sexo.
La clarividencia ha arrancado este lunes con la selección del comité, que se ha prolongado durante poco más de dos horas. Finalmente se ha favorito a siete mujeres y a dos hombres, quedando otras dos mujeres como suplentes. El procesado ha comenzado la clarividencia sentado adjunto a su letrada, con semblante serio y tranquilo.
Cerca de las 13 horas se han empezado a analizar públicamente los escritos de calificación de las partes y el abogado de ocho de las víctimas, el penalista Juan Carlos Navarro, ha solicitado que se omitiera el nombre y los apellidos de las víctimas no mortales, a lo que se ha opuesto la defensa del procesado.
La presidenta del tribunal ha optado por una decisión intermedia y ha establecido dejar el nombre de las víctimas adjunto a sus iniciales
La presidenta del tribunal ha optado por una decisión intermedia y ha establecido dejar el nombre de las víctimas adjunto a sus iniciales. Ha tomado esta medida tras recapacitar que las víctimas, a las que ha definido como "valientes", nunca han solicitado ser testigos protegidos.
Tras ello, se ha continuado con la repaso de los escritos en un seso que concluirá el próximo 15 de julio, según el calendario auténtico. El procesado se enfrenta a una pena, tal y como reclama Fiscalía, de 130 primaveras de prisión por 11 delitos de desmán sexual --tres de ellos como medio necesario para un delito de homicidio y siete para un delito de lesiones--; y un delito contra la lozanía pública.
Por otra parte, la Fiscalía considera que concurre en el procesado la circunstancia desventaja de naturaleza para los delitos de desmán sexual y los tres homicidios. Pegado a la pena de prisión, reclama cuantiosas indemnizaciones para las víctimas o familiares.
Por su parte, los padres de Marta Pelado, quienes ejercen en el procedimiento como imputación particular, piden para el procesado la prisión permanente revisable. Las otras víctimas personadas en la causa todavía reclaman esta pena.
Marta Pelado desapareció hace más de dos primaveras en Manuel tras permanecer relaciones sexuales con el procesado, quien reconoció que la descuartizó tras una homicidio fortuita.
Informes forenses han descartado en un escrito que Jorge Ignacio padezca una enfermedad mental y han detectado que tiene rasgos de una personalidad antisocial.
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