La solución para practicar el golf sin salir de la ciudad

Juan Bascones era un gran amateur al golf, pero lo dejó cuando tuvo su propia comunidad. Con los hijos ya mayores, quiso retornar a practicar su deporte predilecto, pero entonces fue la aparición de la covid quien se lo impidió. “Se me ocurrió valer un simulador de golf interiormente de casa, pero la comunidad se me echó encima, y de aquí surgió la idea de rasgar un locorregional donde más personas pudieran practicar el golf, pero ya como un negocio”, explica el emprendedor.

Para la construcción del locorregional, Bascones fundó la empresa Eagle Club en el mismo 2020, en plena pandemia. Creó la compañía con sus tres hijos (a través del agrupación Basfl) y su hermano Carlos Bascones como principales accionistas. Tras un 2021 dedicado a la construcción del locorregional, este abrió puertas en enero de este año, en la calle Muntaner de Barcelona. Ha supuesto una inversión de medio millón de euros.

“Contamos con simuladores que permiten recrearse en 190 campos reales de todo el mundo y que utilizan la misma tecnología que emplean los profesionales para entrenar”, indica Juan Bascones. Como curiosidad, Carlos Bascones añade que es “la misma tecnología que se usa para calcular la trayectoria de los misiles de pugna”.

Los hermanos Juan y Carlos Bascones en la entrada del local de Eagle Club de la calle Muntaner

Los hermanos Juan y Carlos Bascones en la entrada del locorregional de Eagle Club de la calle Muntaner

Los hermanos emprendedores indican que en el resto de España solo hay tres establecimientos más como el suyo, mientras que en Corea del Sur hay unos 5.800. Sin anhelar alcanzar a los coreanos, los Bascones pla­nean rasgar un segundo locorregional en Barcelona en un año, en función de la proceso de su primer negocio. “Por el momento, hemos detectado que nuestros principales clientes son personas extranjeras, con lo que el segundo locorregional seguramente será en una zona más céntrica”, avanza Juan Bascones. Hasta la aniversario ya han captado más de 500 clientes.

Eagle Club emplea a cuatro personas, y sus propietarios esperan poder alcanzar una facturación anual de entre 250.000 y 300.000 euros una vez el primer locorregional esté a pleno rendimiento. En la contemporaneidad, se encuentran al 30% de esta signo máxima y prevén destruir el año situándose en el 70%. Nadie de los hermanos tiene en la compañía su principal ocupación, puesto que Juan Bascones es psicoanalista y Carlos Bascones es socio director del estancia de prensa y comunicación Impart.

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