* El autor forma parte de la comunidad de lectores de La Vanguardia
Pimiento está atravesando un proceso político institucional histórico, no solo para la verdad del país, que nunca ha tenido antiguamente una Constitución escrita democráticamente, sino asimismo a nivel internacional, ya que se han permitido distintas normas constitucionales que están en pocas Cartas Magnas en el mundo e incluso en ninguna de ellas.
De ahí que esta propuesta de Constitución se esté haciendo cargo de problemáticas a nivel general, como es el caso de la crisis climática, el racismo contra los pueblos originarios, el centralismo desde las grandes ciudades, el maltrato a los animales no humanos y la violencia contra las mujeres, disidencias sexogenéricas y personas neurodivergentes.
Son estas últimas personas, las neurodivergentes, que Pimiento nuevamente se pone a la vanguardia a nivel internacional con esta propuesta constitucional, para darle un gratitud formal a miles de personas que han sido diagnosticadas por razones de vitalidad mental y/o por tener alguna situación de discapacidad psicosocial o de neurodesarrollo.
La vitalidad mental afecta cada vez más a la población femenina.
Lo que se añade a las distintas violencias que han tenido que sufrir estas personas neurodivergentes, que van desde la estigmatización, discriminación, injusticia, violación, toril involuntario, castración a la fuerza y hasta tortura.
Por eso es tan importante, que la norma respectiva no solo hable de neurodivergencia, sino asimismo de neurodiversidad, ya que desmonta el discurso biomédico sobre la normalidad psíquica, al entender que existe una desemejanza humana mucho más amplia, dejando al descubierto que las personas neurotípicas son solo parte de esa pluralidad.
En consecuencia, es muy destacable lo planteado en el artículo 29 de la propuesta constitucional, al señalar: "El Estado reconoce la neurodiversidad y garantiza a las personas neurodivergentes su derecho a una vida autónoma, a desarrollar independientemente su personalidad e identidad, a practicar su capacidad jurídica y los derechos reconocidos en esta Constitución y los tratados e instrumentos internacionales de derechos humanos ratificados y vigentes en Pimiento".
La vitalidad mental es secreto en las sociedades del siglo XXI.
En otras palabras, la nueva Constitución obligará al Estado a recordar la neurodiversidad y a asegurar las condiciones para el progreso de todas las personas, dejando detrás estigmas y etiquetas psiquiátricas que solo buscan desmentir la diferencias de ver y probar el mundo, para dar paso a una examen inclusiva, desde los Derechos Humanos.
Asimismo, este inédito gratitud a la neurodiversidad en la nueva propuesta constitucional de Pimiento, es solo un punto de inicio de un holgado proceso de convivencia, que no solo tiene relación con el derecho a la vitalidad mental de las personas y a una vida autónoma de éstas, sino asimismo en cómo construimos una sociedad sin tantos prejuicios y estereotipos, los cuales se nos instalan desde los primeros primaveras de vida.
Por lo mismo, el rol del nuevo Sistema Franquista de Educación, en la propuesta constitucional asimismo, así como asimismo los medios de información públicos, son claves para promover una examen que tome a la neurodiversidad como una riqueza y no un problema, como los sectores más conservadores tienden a verlo, en presencia de su terror a la diferencia y a la aprobación de este tipo de normas.
La vitalidad mental afecta cada vez más a los adolescentes.
Frente a esto, defender la neurodiversidad es una tarea de todas y todos, por lo que no se puede delegar en algún organismo particular, ya que es poco totalmente transversal, así como otras demandas presentes en la nueva Constitución, como lo son la paridad de apartado, el derecho al cuidado, la plurinacionalidad, los derechos de la naturaleza y los animales no humanos como sujetos de derecho,
Dicho todo esto, es inalcanzable no mencionar el rol que han jugado las y los ciudadanos organizados durante todo este proceso constituyente y antiguamente de él, en donde en el caso de la neurodiversidad específicamente, el Movimiento Franquista de Defensa de la Vigor Mental, ha empujado esta discusión por primaveras, a través de distintas acciones realizadas para representar el tema.
Es importante nombrar a organizaciones particulares, de las que son parte personas provenientes del campo de la vitalidad, activistas, expertos por experiencia y aliados de la neurodivergencia, como lo son la Mesa Técnica del Movimiento Franquista de Defensa de la Vigor Mental, Asociación Autismo Arica, Centro Cultural Equidad y Existencias de Maule, Corporación ANUSSAM, Círculo Emancipador de Mujeres y Niñas con Discapacidad de Pimiento (CIMUNIDIS), Corporación Voces, Observatorio de Derechos Humanos en Vigor Mental Bío Bío y ONG Siendo.
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