Rosalía convierte en oro todo aquello que toca. O quizás deberíamos afirmar en hielo, teniendo en cuenta el caluroso verano al que nos estamos enfrentando, un concepto que conectaría mucho mejor con su puesta en panorama para su nuevo clip, que en cuestión de horas ya se ha erigido en tendencia en todo el mundo.
La cómico catalana ha hecho gracia una vez más de su versatilidad y astucia camaleónica para triunfar en un registro poco alejado de lo que habíamos trillado en su infinito catálogo sonoro: la canción del verano, eso sí, tuneada bajo su prisma creativo.
Rosalía en una panorama del videoclip de 'Despechá'
La intérprete estrenaba el pasado miércoles el videoclip de la canción Despechá , sin duda uno de los hits de esta temporada de sol y playa, impulsado por el reconvención que ha tenido en redes sociales como TikTok donde el tema está causando un gran furor. Rosalía lo pudo comprobar en su primer concierto de la viaje de presentación de su disco Motomami en Almería, un feedback que sorprendió a la propia cómico y que abrió la puerta a preparar el sucesivo paso.
Rosalía hace oficial el ballet del verano: estos son los pasos de 'Despechá'
Este es el punto de partida de una hoja de ruta más o menos improvisada pero con los pilares perfectamente calculados. La brisa que azotaba en ese momento conjuraba algunos rudimentos que hacían que la canción fuera perfecta para probar poco nuevo.
El ritmo, inspirado en el merengue y el mambo dominicano, muy adecuado para el verano, unido al empoderamiento habitual de la cómico, con unos decibelios más de sensualidad, y un mensaje que invita a liberarse, exacto en la época del año en el que la muchedumbre suele retar más a sus problemas y radicar de guisa desinhibida.
Rosalía durante la reproducción de 'Despechá' en la playa de Portixol de Mallorca
Sin duda es el cóctel consumado para construir un éxito que funcione en verano, pero todavía quedaba espacio para intentar dar una envés de tuerca más y activar el cifra sorpresa al que suele abrazarse la intérprete catalana en la mayoría de sus proyectos. Si el manifiesto se había hecho suya la canción de una guisa tan apasionada, seguramente la cómico contiguo a su equipo de confianza pensaron que era el momento de que fuera ella la que efectuara un locución de cintura y dejara el divismo y el nacimiento de los focos del tablado para descabalgar textualmente a la arena.
Eso sí, con condiciones. Esta vez Rosalía dejó en el armario los artificios, los lujos y las puestas en panorama más inalcanzables con el batalla de hacer que aquello que es ordinario para su gran manifiesto termine convirtiéndose en poco extraordinario. Ni fiestas privadas en yates, ni coreografías en paraísos exóticos, ni altares celestiales.
Rosalía durante la reproducción de 'Despechá' en la playa de Portixol de Mallorca
La intención en el nuevo clip de Rosalía es hacer un retrato costumbrista de aquella verdad veraniega de la que gozan la mayoría de los mortales, con un advertencia made in spain y una estampa plagada de clichés que, aunque a primera clarividencia a más de uno le echarían para antes, radiografía a la perfección la puesta en panorama veraniega de la mayoría de playas del país.
Si poco está demandando con fuerza el manifiesto millennial o centennial es un prototipo de cómico más cercano, que se muestre con sus cicatrices y que les permita activar sus aspiraciones a través de la identificación en una comparativa que, eso sí, a veces está mucho más alejada de la verdad de lo que parece. La imitación en redes sociales es una constante, de ahí que la colaboración del cómico que decide humanizarse en los mismos entornos que los demás, no solo sea aceptablemente recibida, sino que genera un plus de exaltación más o menos desmedida.
Rosalía ha preferido la playa de Portixol de Mallorca para registrar el videoclip de 'Despechá'
Rosalía eligió Mallorca para inmortalizar su nuevo hit , y aprovechó el recital que dio en Palma el pasado 1 de agosto para padecer a parte sus planes. Dos días antiguamente, la cómico convirtió la playa del pueblo pesquero de Portixols en el tablado consumado para su puesta en panorama en una audacia que, dicho sea de paso, ha desembocado en una energía de promoción de gran magnitud para la isla balear.
El clip ha sido dirigido por Mitch Ryan, que ya trabajó con ella en el vídeo de Hentai , aunque en esta ocasión el resultado ha sido muy diferente. En tiempo récord, pero con el concepto muy claro, Rosalía dibujó un retrato costumbrista, incluso poco cañí, de una verdad que ella conoció aceptablemente. Picnics low cost en la arena con patatas, pierna y berberechos, pelea de pistolas de agua, cuerpos alejados de los cánones de belleza, señoras mayores abanicándose en sus sillas, niños alborotando cerca de las toallas de otras personas, toques con un balón de fútbol y bailes improvisados con más jolgorio que ritmo conviven en los poco más de dos minutos que dura el videoclip.
Rosalía, en el videoclip 'Despechá'
Rosalía, que aparece al inicio tumbada sobre bolsas de hielo en una imagen que recuerda la icónica El comienzo de beldad de Botticelli , participa del cuadro costumbrista playero ataviada en la mayoría de los planos con un bikini rojo y unos mini shorts desabrochados, un estilo muy habitual en los 2000. La misma época en la que jugaba con su hermana a llenarle el cuerpo de conchas, una imagen que asimismo recupera para este vídeo.
Es la reconversión de la mítica canción del verano que triunfó en épocas anteriores, pasando por el filtro flagrante donde se pesquisa más conseguir hits que se adapten a la época veraniega de festivales, carpas y discotecas, que seguir los parámetros de una fórmula poco más pachanguera que apadrinó Georgie Dann.
Rosalía con su bikini estampado y las botas rosa chicle
Rosalía lo ha vuelto a hacer: tramar un nuevo éxito abrazándose al aventura, sin perder su identidad artística. Pena que no ha llegado a tiempo para introducir el nuevo invitado de las playas españolas: el puerco salvaje. Parece que hasta ellos han decidido despecharse. Y eso asimismo tiene mérito.
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