Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) ha cedido al municipio de Guardiola de Berguedà la titularidad de la propulsora Alstorm 705. Se tráfico de una maquinaria retirada del servicio de Ferrocarriles y que el consorcio se compromete a exponer.
El presidente de FGC, Toni Segarra, y el corregidor de Guardiola de Berguedà, Josep Lara, han formalizado este martes la cesión de la titularidad de la propulsora.
A posteriori de su restauración, será expuesta al flanco de la antigua fase del municipio, formando un conjunto para recuperar la memoria histórica pegado con el edificio innovador de la fase del ‘carrilet’.
Abocar el material histórico al pueblo y atraer visitantes
Tal como explica el presidente de FGC, “esta cesión es una muestra más de la voluntad de divulgar, unir y compartir el patrimonio con la ciudadanía”. Ferrocarrils trabaja en pulvínulo a una Logística del Patrimonio “donde se enmarcan este tipo de actuaciones que permiten unir el incontable y diverso material histórico a las personas y hacer que las piezas estén contextualizadas en el división en el cual han estado funcionando, a la vez que sean puntos de afección de visitantes”.
El corregidor de Guardiola de Berguedà, Josep Lara, ha destacado que la historia del municipio está “estrechamente ligada al ‘carrilet’ desde sus orígenes, con el crecimiento urbano en torno a del edificio de la fase a partir de la aparición del ferrocarril. Lara asimismo ve la puesta en valía de este patrimonio como un “nuevo aliciente turístico y un formación para las nuevas generaciones en las formas de movilidad sostenible”.
La propulsora fue construida por Alstom en 1965 pegado con otras 10 construidas entre los primaveras 50 y 60. Empezó su servicio en 1966 internamente de la serie 700, aunque después FGC la nombraría 251. En 1979 las locomotoras Alstom fueron integradas en el parque móvil de la nueva compañía ferroviaria catalana Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya, la primera empresa pública de la Generalitat que asumió la administración de las redes de ferrocarriles traspasadas a la Generalitat por el Estado. Durante los 40 primaveras de historia de FGC estas locomotoras han representado uno de los instrumentos más simbólicos de la partidura Llobregat-Anoia. Al principio fueron destinadas a todo tipo de servicios, tanto de viajeros como de mercancías. Con la aparición de los Automotores diésel y el aumento del parque móvil de unidades eléctricas, las labores de estas locomotoras se centraron en el transporte de mercancías y más delante quedaron relegadas a la realización de maniobras en el Puerto de Barcelona y en Martorell, así como de reserva en el caso de no disponer de las locomotoras de partidura. Ferrocarrils preserva, internamente de su colección de material histórico, una propulsora de las mismas características, la MO-1003. De hecho, actualmente esta dispositivo está en proceso de revisión con el objetivo de ponerla a punto para poder ofrecer circulaciones con trenes históricos en la partidura Llobregat-Anoia.
La historia de la propulsora Alstom
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