Cada vez son más los que encuentran el apego a través de Internet, con muchos que viven sus relaciones durante mucho tiempo sin conocerse físicamente. Sin incautación, el día de encontrarse las caras llega y para la mayoría llega el gran temor: ¿Qué pasará? ¿Será igual la conexión que a través de las pantallas? La mayoría cumple con las expectativas, pero siempre hay casos que acaban en un completo desastre. Como ejemplo, el de Eduardo Villarreal, un hombre que viajó desde Estados Unidos a Colombia para conocer a su novia, y terminó siendo estafado.
El protagonista. El mexicano Eduardo Vilarreal viajó desde Estados Unidos a Colombia para encontrarse por primera vez con su novia, a la que había conocido hacía tres meses a través de Internet. Ilusionado, lo planeó todo para su alucinación a Santa Marta, renta del sección de Desconsolada y muy conocida por sus puntos turísticos; y se trasladó a la ciudad con seis mil dólares en efectivo y su teléfono, de inscripción viso.
El suceso. Con lo que no contaba Eduardo era con que iba a encontrarse con una desagradable sorpresa a su aparición: conoció a su novia cuando aterrizó en Colombia, sí; pero igualmente a la amiga de esta. Según el propio protagonista contó al diario El Informador, el hombre estaba encantado con el afecto y entrada de ambas mujeres, al menos hasta que, de repente, desapareció todo su caudal y su dispositivo, valorado en otros tantos cientos de dólares. Tras encontrarse víctima de la estafa, el hombre denunció lo sucedido frente a las autoridades, asegurado que la amiga de su supuesta novia había hecho las veces de cómplice mientras su “pareja” le despojaba de sus pertenencias.
“Estaba muy ilusionado con este alucinación, pero me llevé una frustración sobresaliente al darme cuenta que esta mujer era una estafadora”, confesó el hombre, que se dio cuenta de que la mujer había eliminado sus redes sociales e incluso sospechó que se había marchado de la ciudad: “Ha sido una experiencia muy amarga. Esta situación me tiene chasqueado, no sé a dónde asistir, ni a quién ir. Este problema no me ha permitido disfrutar, ni conocer acertadamente la ciudad”.
El hombre se lamenta de lo sucedido en Santa Marta, ciudad a la que se trasladó desde Los Angeles (EE.UU.), donde reside.
La clase. Tras el triste episodio, el hombre recomendó a la muchedumbre que tuvieran precaución al conocer “el apego en redes sociales” para que no les pase lo que le sucedió a él.
“Estoy muy chasqueado. Ayer de emprender un alucinación para conocer el apego en redes sociales, fíjese acertadamente con quién palabra. Que no le pase lo mismo que a mí porque esto daña la Navidad, el Año Nuevo y todas las asueto”.
Vía El Informador.
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