La historia de Aline, una mujer sin techo que vive en el coche con sus dos perros en Torrejón

Aline fue desahuciada por impago, tras quedarse en paro a raíz de la pandemia. Se comercio de una novato rumana de 42 abriles, que lleva tres meses viviendo en su coche en el municipio madrileño de Torrejón de Ardoz porque no se quiere separar de sus dos perras Kaila y Lara, informa Telemadrid.

La mujer fue desahuciada por no poder hacer frente al suscripción mensual de la cuota de locación. Bajo ningún concepto quiere separarse de sus  mascotas, ni dejarlas en un refugio "porque en otro sitio  no van a estar como conmigo", apunta.

Ambas perritas llevan sus respectivos abrigos porque estos días hace mucho frío  por el día y por la indeterminación en la Comunidad de Madrid. "Es muy duro residir en un coche, pero no quiero dejar a mis perras en  un refugio", señala. Por otra parte, ha colocado mantas en los bajos del transporte para soportar las bajas temperaturas, ya que tener la calefacción encendida toda la indeterminación le resulta inviable económicamente.

En su opinión, podría arrendar una habitación, pero "la multitud no quiere alquilarme porque dice que es una guarrada dejar todo el día a los animales solos en el calle".

Pobreza

En España hay 4,8 millones de personas que viven en una situación de pobreza severa, lo que supone el 10,2% de la población en el 2021, según el mensaje detallado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Limitación Social del Estado Gachupin. Dicho mensaje ha contabilizado 317.000 personas más que el año precedente. El origen para catalogar a un hogar en esta situación es que sus ingresos anuales sean de 6.357 euros. Es aseverar, que tengan para todos los gastos del mes unos 530 euros.

Ella tiene claro que no las va a desamparar: "Son mi grupo, es lo único que tengo. Son ellas dos, no hay más", concluye.

Aline, que lleva 22 abriles en España, nunca pensó que iba a terminar en esta situación. "Nunca he vivido con lujos, pero al menos tenía trabajo y podía sufragar una casa para residir", solloza.

Trabajó de camarera durante muchos abriles. "Con la venida de la pandemia me quede sin trabajo" argumenta. Luego, continua, "he trabajado a través de una ETT durante tres abriles de mozo de almacén, pero ahora vuelvo a estar en paro", aclara.

Los servicios sociales dan ayudas

Sus mascotas son su vida. "La ancho tiene  hiper tiroides y le tengo que dar medicamento. Esa medicina no es  muy cara, pero sí la comida, como las salchichas que les doy". Incluso, Aline come poco y mal para poder avituallar a sus mascotas: "Si ellas están perfectamente, yo igualmente", dice.

Alina alguna indeterminación de mucho frío duerme en casa de su hermano, pero ella no quiere agobiar. Los Servicios Sociales del Comunidad de Torrejón le han ofrecido una ayuda para arrendar  una vivienda al estar en una situación de pobreza extrema - como al resto de ciudadanos-, pero "el problema es que Aline no encuentra una habitación para arrendar en la que se le permita residir con sus mascotas", aclara un portavoz del Comunidad de Torrejón.