Los Mossos d'Esquadra cambian de uniforme a posteriori de 40 primaveras. El cambio afecta a los 11.000 agentes de seguridad ciudadana, que son los que están a pie de calle.
El uniforme mantiene los colores identificativos del cuerpo -azul, rojo y blanco-, pero el cambio más visual es la camisa, que pasa de ser cerúleo Paraíso a cerúleo anfibológico.
Este viernes se ha realizado la presentación oficial y los agentes que patrullan esta tarde ya van vestidos con el nuevo uniforme que, según ha explicado el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, es más técnica y deseo en modernidad y confortabilidad.
El cambio de vestuario ha costado cerca de 11 millones de euros. Se han fabricado 300.000 piezas y, de momento, no hay chaquetas para todos. Se han priorizado las delegaciones más frías: Pirineo, Ponent y Catalunya Central.
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