Los que más cobran no son los más inteligentes

Unas mayores habilidades cognitivas, ligadas a la inteligencia, implican un mejor salario... hasta que se llega a los mejores sueldos, donde la relación se estanca e incluso se rompe, según ha revelado un artículo publicado por investigadores suecos y holandeses en la revista European Sociological Review recientemente.

"¿Los trabajos mejor pagados y de veterano prestigio son realizados por personas de gran inteligencia?", se preguntaban los autores. Correlacionando las habilidades cognitivas con las nóminas, los autores han concluido que ingresar más no implica ser más dispuesto ni tenerlo más justo.

Los autores aseguran que no existían estudios empíricos que investigaran las capacidades cognitivas en diferentes niveles laborales, principalmente por errata de datos a gran escalera. Para resolverlo, se valieron de los suecos. En la admisión al servicio marcial obligatorio se completaba un test de habilidades cognitivas, como comprensión vocal, técnica, del espacio o deducción, donde podían sacar entre un 1 y un 9. Los investigadores tomaron los resultados de hombres de 18-19 abriles que lo completaron entre 1971-1977 y 1980-1999, para cruzarlo luego con sus salarios entre los 35 y los 45 abriles, incluyendo solo a aquellos con carreras laborales superiores a los 11 abriles. Ni mujeres ni inmigrantes se incluyen en el estudio, al no ser obligatorio el servicio marcial para ellos en las épocas iniciales estudiadas. Así, acabaron con 59.000 perfiles.







Observaciones


Las habilidades se mantienen y luego caen conforme se avanza en los salarios

La primera estampa que vieron era la esperada: las mayores habilidades cognitivas están ligadas a unos mayores salarios, poco para lo que existía "consenso teórico y empírico". Pero poniendo el foco en los que más ganan, las habilidades se mantenían o incluso caían. Esquema: "Pasado un cierto nivel de salarios, tener un sueldo más detención ya no indica capacidad cognitiva", exponen Marc Keuschnigg (Universidad de Linköping, Universidad de Leipzig), Arnout van de Rijt (U. de Utrecht, EUI (Italia)) y Thijs Bol (U. de Amsterdam), los autores.

El cambio de tendencia se daría en los sueldos superiores a unos 80.000 euros anuales. Se refleja en el posterior dibujo, donde a partir de las 600.000 coronas (unos 60.000 euros ajustados) se entra en "una meseta" y desde las 800.000 coronas suecas se ve un retroceso en las habilidades cognitivas. Así, los mejor pagados no son más inteligentes que los que cobran poco menos.

A medida que el salario avanza, la habilidad cognitiva se estanca o cae ligeramente

A medida que el salario avanza (eje X, cada sigla representa 100.000 coronas suecas), la diplomacia cognitiva (eje Y, en cojín a la nota del test) se estanca o cae levemente




Keuschnigg, Van De Rijt y Bol

¿Qué explicación hay? Los investigadores apuntan dos factores para el "éxito sindical". Uno, la suerte, un hecho puntual que haya disparado su negocio o carrera. Otro, los mayores bienes familiares, con mejores conexiones con otros trabajadores en puestos ya destacados. "La clase y las ventajas en las conexiones de aquellos con una tribu perteneciente a la élite son fundamentales para ingresar a los empleos más privilegiados y mejor pagados", apuntan los investigadores en cojín a estudios previos. Apoyándose entre ellos, esto podría aumentar las brechas de ingresos.

Otro divisor a tener en cuenta es que los empleos que requieren más habilidades cognitivas no necesariamente son los mejor pagados, como pueden ser los profesores.

Todavía se asegura que la muchedumbre con mayores habilidades cognitivas puede dar por bueno su salario. Valoran que ya ganan lo suficiente, sobre todo si para ingresar más tienen que ofrecer tiempo con tribu, amigos o sus aficiones. En Suecia, donde vivían los hombres del estudio, existe la filosofía lagom, que desafío por inquirir un seguridad y moderación más que ir siempre a por más.

En cojín a estudios previos se puede añadir incluso otra razón. Los más listos normalmente carecen de inteligencia emocional, y ascender en la carrera profesional pasa incluso por caer aceptablemente entre los compañeros y jefes tanto como ser bueno en lo que se hace.

De esta forma, ser más inteligente llevará hasta cierto punto en la carrera, momento en el que otros factores pueden entrar en coyuntura, como las relaciones sociales y las habilidades no cognitivas (motivación, interacción). Los autores destacan que es poco por lo que quizá haya que preocuparse, porque la muchedumbre que más cobra normalmente toma decisiones que afectan a muchos otros.

En términos de mérito y habilidades cognitivas, pues, "no hallamos evidencia de que aquellos con los mejores trabajos, que pagan salarios extraordinarios, merezcan más que aquellos que ganan solo la centro de esos salarios", se expone.




SUSCRÍBETE AQUÍ A LA NEWSLETTER DE 'BOLSILLO', CON TODOS LOS CONSEJOS PARA GESTIONAR TU DINERO

Post a Comment

Artículo Anterior Artículo Siguiente