Podría ser un acto más de carnaval pero nulo más acullá de la ingenuidad. Estas palomas disfrazadas están pegadas en unos tablones para conmemorar el Día de la Candelaria durante una ceremonia, tras la cual pasearán en procesión. Ésta es la tradición que se sigue desde hace décadas en Alcalá la Efectivo, un pueblo de Jaén, y que, un año más, ha vuelto a insubordinar ampollas entre los ciudadanos que alzan sus voces en defensa de los animales.
Las aves no sólo permanecen inmóviles durante todo el acto religioso en sí sino que, según denuncia el Partido Animalista Pacma, tienen que soportar el bullicio y el ruido de la multitud, unido a las explosiones pirotécnicas que pueden conmover a ocasionarles la crimen.
😠 Estas imágenes han sido captadas hoy en Alcalá la Efectivo (Jaén), en la Fiesta de La Candelaria: animales atados, expuestos a música y fuertes ruidos, con pegamento en sus cabezas... @Alcala_la_Real, ¡esto es maltrato! ¿No os da vergüenza permitirlo?
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📷 @fuerzaanimalpro pic.twitter.com/bvx1VC1LWr
Frente a las críticas por someter a esta “situación de maltrato” a las aves, como defiende Javier Escaparate, presidente del partido, la parte que aboga por proseguir esta costumbre, si correctamente las voces en defensa de la tradición son las menos en redes sociales, donde las imágenes de los animales disfrazados y atados han circulado como la pólvora suscitando centenares de comentarios de desaprobación.
En nombre de la tradición: homenaje al Papa Francisco y a Benedicto XVI
Al parecer, el origen de contar con palomos durante la Candelaria se halla en las escrituras, si correctamente el hecho de disfrazarlas se incorpora a partir del siglo XX. Ahora, varias parejas de aves se exponen con diferentes atuendos, algunos en honor a alguna hermandad y otras como homenaje a un hecho significativo de la población. Este año, los palomos simulaban al Papa Francisco y a Benedicto XVI, tras el nuevo fallecimiento de éste extremo. Sea como fuere, es un acto que sirve como la antesala de la Semana Santa, si correctamente muchas voces abogan por sustituir la presencia de los animales por muñecos en forma de palomas, de guisa que se les evite el sufrimiento.
“Deprimente”, “una auténtica vergüenza”, “de otro siglo”… son algunos de los comentarios que se pueden interpretar en redes sociales a partir de la denuncia de Pacma, estructura que ha señalado “las altas dosis de estrés a posteriori, ayer y durante el acto" que sufren los animales así como las "secuelas de vitalidad posteriores, por otra parte de las complicaciones derivadas del uso de pegamento en su plumaje”. Por otro flanco, Escaparate insiste en que el ruido estridente puede causarles “problemas cardíacos derivado de la ansiedad, y, si a ello sumamos la presencia de cientos de personas a su rodeando mientras están atadas, tendremos una situación de maltrato en toda regla", ha manifestado.
Por otra parte, no solo ha criticado que se utilicen animales en espectáculos públicos, sino asimismo que "su presencia en ellos no tenga ningún fin y que sea totalmente prescindible, como afirman que es este caso". "El Comunidad tiene mil opciones para celebrar sus fiestas y ha escogido la más complicada. A menos que quieran polemizar, lo que han hecho es disparatado y cruel en todos los sentidos", ha concluido.
Desde el consistorio no se le ha cubo respuesta aún a este denuncia pública hecha por Pacma.
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