El agua es un expediente esencial para avalar el presente y la sostenibilidad futura del planeta. El cambio climático intensifica y hace más habituales los periodos de sequía, especialmente en áreas donde la escasez hídrica es permanente, como es el caso del curvatura mediterráneo. Y cuando llueve, lo hace de forma irregular. Un gran contienda que es al mismo tiempo un incentivo para innovar y encontrar nuevas soluciones en presencia de la emergencia climática.
El Día Mundial del Agua, que se celebra el 22 de marzo, pone este año el foco precisamente en la indigencia de acelerar los cambios para hacer frente a esta situación. Un día a día especialmente preocupante en Cataluña, donde los embalses tienen unas reservas de agua del 27% de su capacidad (menos de la porción que hace un año). El noviembre pasado, la Agencia Catalana del Agua (ACA) decretó el estado de alerta en el campo de acción metropolitana de Barcelona, y a principios de este mes decretó el estado de excepcionalidad, con medidas más restrictivas. Estamos viviendo la situación más crítica de los últimos cincuenta primaveras.
La regeneración del agua, la mejor alternativa
Se estima que el obligación hídrico flagrante en la región metropolitana de Barcelona es de 60 hectómetros cúbicos (hm3) al año, y que en 2050 llegará a 130 hm3. Un contienda que pone en peligro el abasto de agua a las ciudades, la industria y la agricultura. ¿Qué hacer en presencia de este arduo atmósfera?
Aigües de Barcelona, referente mundial en materia de innovación en el sector del agua, reto por el uso de agua regenerada. Regenerar el agua significa someter el agua depurada a un tratamiento adicional para que pueda reutilizarse para distintos usos siguiendo un maniquí circular. La forma más sostenible de preservar los posibles hídricos y los ecosistemas acuáticos y evitar el impacto de los periodos de sequía y la escasez hídrica estructural en la que estamos inmersos, dando una nueva vida al agua.
En el campo de acción metropolitana de Barcelona está decretado el estado de excepcionalidad: estamos viviendo la situación más crítica de los últimos 50 primaveras
Aigües de Barcelona regeneró en 2022 un total de 50 hm3 de agua, el equivalente al consumo de agua anual de más de un millón de personas. Hoy en día, los usos más demandados del agua regenerada son como fuente de agua para la tiempo de tratamiento de agua potable (ETAP) de Sant Joan Despí; los usos ambientales, como el mantenimiento del caudal ecológico del río Llobregat o la inyección en los acuíferos para evitar la intrusión salina, y los usos agrarios, como el riego del Parque Agreste del Baix Llobregat, el Canal de la Infanta o el Rec Vell de Sant Vicenç dels Horts.
Aigües de Barcelona está liderando la elaboración del Plan director de agua regenerada metropolitano, en colaboración con la Delegación y los usuarios potenciales de agua. Este Plan representa una cuchitril estratégica esencia para el división, ya que traza en detalle todos sus usos potenciales, a presente y a futuro, y los sistemas de tratamiento y distribución necesarios para que se conviertan en una ingenuidad; un trabajo fundamental para avalar la resiliencia hídrica.
Asimismo, la compañía ha propuesto un esquema, bajo el paraguas de los fondos europeos Next Generation, para alcanzar la resiliencia hídrica de forma sostenible en la región metropolitana de Barcelona, teniendo en cuenta las deyección de agua actuales y futuras. Este esquema estructural permitiría incorporar hasta 150 hm3 anuales de nuevos posibles. De este modo se garantizaría la disponibilidad de agua en el campo de acción metropolitana de Barcelona.
Las alianzas son esencia
Las alianzas con el división son esencia para avanzar en este nuevo maniquí más sostenible. Un claro ejemplo de ello es el esquema para distribuir agua regenerada desde la tiempo de regeneración de agua (ERA) de Riu Sec, en Sabadell, en dirección a los municipios de Sant Cugat del Vallès y Cerdanyola del Vallès. Una iniciativa de Aigües de Barcelona y Aigües de Sabadell por encargo del Dominio Metropolitana de Barcelona (AMB) y con el impulso de la ACA que cuenta con la colaboración de los ayuntamientos de Sabadell, Sant Cugat y Cerdanyola, así como de diversos usuarios esencia. La iniciativa, una buena muestra de colaboración público-privada, permitirá utilizar agua regenerada para el riego de zonas verdes, por otra parte de usos residenciales, en instalaciones deportivas y en equipamientos estratégicos como el Parc de la Ciència.
En Molins de Rei, Aigües de Barcelona lidera el estudio de recuperación del paisaje y la biodiversidad de los humedales de este municipio, que ocupan el espacio de un antiguo recodo del río Llobregat, con agua regenerada. El agua se traerá desde la ERA de Sant Feliu de Llobregat, donde se alcahuetería el agua de Molins de Rei y de otros municipios cercanos.
El agua regenerada es la mejor alternativa para combatir la sequía
La digitalización es todavía una útil potente para mejorar la resiliencia frente a los pertenencias de la emergencia climática. En este sentido, Aigües de Barcelona ha impulsado el esquema RESSONA, pegado con la Delegación, para la transformación digital de todas las etapas del ciclo urbano del agua en el campo de acción metropolitana de Barcelona. Esta interpretación pretende incrementar la resiliencia del ciclo urbano del agua y, a la vez, acortar los impactos climáticos de la actividad. Una transformación ambiental y social que opta a una subvención de 10 millones de euros del PERTE de digitalización del ciclo del agua y que se encuentra actualmente en etapa de evaluación por parte del Servicio para la Transición Ecológica y el Lucha Demográfico.
Es necesario, pues, contar con una inversión sólida y coordinada en infraestructuras que mejoren la sostenibilidad y resiliencia del división, a fin de avalar el suministro a las ciudades del futuro. Un presente con menos agua requiere encontrar nuevas soluciones y aplicar todo el conocimiento habitable, con la veterano celeridad e impulso colectivo. Ya no hay excusas, es hora de ejecutar y de sumar esfuerzos.
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