Son las 19.00 horas de la tarde del miércoles. Aunque es primavera, llueve en Barcelona y el ámbito es fresco. Pero cero impide que las primeras familias alemanas se dejen ver por las calles de la renta barcelonesa con algunas bufandas del Eintracht de Frankfurt. Hacen turismo y disfrutan de la restauración catalana con alguna que otra cerveza. El centro de Barcelona con la plaza Reial y la plaza Catalunya se han convertido en sus mejores aliados para animar la fiesta.
Una clan de alemanes, seguidores del Eintracht de Frankfurt, haciendo turismo en Barcelona visitando la catedral
Ellos son los primeros de los más de 25.000 aficionados del Eintracht que tienen previsto durar a la renta catalana para comportarse una cita histórica. Y los que no han podido recorrer han despedido al equipo que lidera Oliver Glasner con todos los honores. “Sin enterarse el resultado de la ida ya teníamos 35.000 solicitudes de entradas para Barcelona. Esto es infrecuente”, dijo el presidente del club, Axel Hellmann a la emisora RTL ayer del partido de ida.
Seguidores del Eintracht de Frankfurt en la plaza Reial
Tras el igualada 1-1 la emoción ha crecido como la espuma en Frankfurt. “No siempre pasa el privilegiado. Partidos como este son por los que uno se dedica al fútbol”, dijo Oliver Glasner, eficaz de que su conjunto llegue a Barcelona con la eliminatoria abierta. “Sabemos que los aficionados tienen muchas ganas de venir. En Frankfurt sólo se palabra de este partido. Nos darán esa fuerza extra que necesitamos y espero que podamos celebrar un resultado bueno con ellos en el Camp Nou”, apuntó el guardameta Kevin Trapp.
En el Barça existe cierto temor delante esta situación, sobre todo porque coincide con la Semana Santa y saben que los periodos vacacionales nunca son los mejores aliados para que la pasatiempo barcelonista acuda en masa al Camp Nou. Adicionalmente, aunque los alemanes recibieron 5.000 entradas, algunos hinchas han utilizado datos de IP alterados y tarjetas de crédito extranjeras para conseguir pases adicionales. Por ello el club cerró este miércoles por la tarde la traspaso de entradas en las taquillas del Camp Nou para evitar que los seguidores del equipo teutón sin entrada las puedan comprar. Las localidades disponibles que quedan para el duelo de la segunda competición continental se destinarán íntegramente a la traspaso telemática para respaldar que las puedan pescar socios y aficionados de la entidad.
Una aficionada del Eintracht paseando por la Rambla de Barcelona
Adicionalmente ha hecho un convocatoria a los abonados que no puedan asistir al duelo para que cedan su asiento “en beneficio del club”. “El ámbito para mí es una de las claves del partido. Esperamos que la masa esté con nosotros. Tenemos que igualar esta extramotivación”, pidió Xavi Hernández.
La Rambla de Barcelona fue otro de los puntos de encontronazo de la pasatiempo del Eintracht
En el interior del vestuario blaugrana existe una conjura. “No es la Champions, pero sigue siendo Europa”, insisten. Y Xavi no se esconde. “Nos tiene que dar coraje no estar en la Champions y ver los partidos del Vivo Madrid y del Villarreal por la tele desde casa”, reconoció el técnico que tiene prisa por regresar a la máxima competición continental y que tomó nota de los errores de su equipo en la ida. “Debemos minimizar las contras y sobre todo las pérdidas”, señaló.
Memphis y Dest recibieron el adhesión médica para entrar en el interior de la serie de 24 convocados. Además está Piqué, aunque sin el plácet médico. “Dependerá de sus sensaciones. No hay duda de que él quiere estar, los partidos grandes le gustan y este lo es. Pero si no está al 100 por 100 no jugará”, remarcó. Piqué está al borde de la suspensión, igual que Jordi Alba, Busquets, Eric Garcia y Gavi. Si son amonestados se perderían la hipotética ida de semifinales de la Europa League. Pero primero deben vencer en un Camp Nou que no se parezca demasiado al Deutsche Bank Park.
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