Los reguladores de prevención de riesgos laborales de Nuevo México han multado con la máxima cuantía posible a la productora Rust Movie Productions por graves fallos en la seguridad de las armas de fuego en el set de rodaje de Rust, donde la directora de fotografía Halyna Hutchins murió por un disparo realizado con un armas que sostenía el actor y productor Alec Baldwin, en octubre del 2021. Concluyen que la compañía productora del filme mostró “total indiferencia” por la seguridad de los empleados.
La Oficina de Seguridad y Lozanía Ocupacional de Nuevo México dice que Rust Movie Productions debe avalar 139.793 dólares (unos 125.000 euros) y ha distribuido una descripción de los fallos de seguridad, que violaban los protocolos en serie vigentes en la industria del cine. Este relato incluye datos como que los gerentes de producción tomaron medidas limitadas o ninguna para chocar dos fallos de funcionamiento en el set antaño del desdichado desnivel. La oficina asimismo documentó quejas sobre la seguridad de las armas de los miembros del equipo que no fueron atendidas y dijo que a los especialistas en armas no se les permitió tomar decisiones sobre capacitación adicional en seguridad.
“Lo que teníamos, según los hallazgos de nuestros investigadores, era un conjunto de peligros obvios para los empleados con respecto al uso de armas de fuego y la yerro de batalla de la gestión sobre esos peligros obvios”, dijo a The Associated Press Bob Genoway, caudillo de la oficina de seguridad profesional.
En un rancho en las alloz de Santa Fe, el 21 de octubre de 2021, Alec Baldwin estaba apuntando con un armas a la directora de fotografía Halyna Hutchins internamente de una pequeña iglesia durante la preparación para la filmación de una espectáculo cuando el armas se disparó accidentalmente y una bala mató a Hutchins ehirió al director de la película, Joel Souza.
En una entrevista tras este dramático suceso, Baldwin dijo a la ABC News que estaba apuntando con el armas a Hutchins siguiendo sus instrucciones en el set del película del Oeste en Nuevo México cuando el revólver se disparó sin que él apretara en ningún momento el percutor.
El nuevo referencia de seguridad profesional confirma que un asistente de dirección, David Halls, le entregó un revólver de gran calibre a Baldwin sin consultar con los especialistas en armas en el set durante o posteriormente de cargarla. Los reguladores señalan que Halls asimismo se desempeñó como coordinador de seguridad y que estuvo presente y fue declarante de dos descargas accidentales de rifles en el set, y que él y otros directivos que sabían de los fallos no tomaron medidas de investigación, corrección o disciplinarias. Los miembros del equipo expresaron sorpresa e incomodidad.
“El coordinador seguridad estuvo presente en el set y no tomó ninguna batalla directa para chocar los problemas de seguridad”, afirma el referencia. “La gestión tuvo múltiples oportunidades para tomar acciones correctivas y optó por no hacerlo. Como resultado de estos fracasos, el director Joel Souza y la directora de fotografía Halyna Hutchins resultaron gravemente heridos. Halyna Hutchins sucumbió a sus heridas”.
James Kenney, secretario del Unidad de Medio Dominio que supervisa la seguridad laborall, dijo que la agencia dedicó 1.500 horas de personal a su investigación, examinó cientos de documentos y realizó al menos una docena de entrevistas con miembros del índice y del equipo. Los investigadores encontraron que los gerentes de producción impusieron límites estrictos a los medios para un pequeño equipo que controlaba las armas en el set y no abordó las preocupaciones sobre una escopeta que se dejó desatendida dos veces.
La damisela armera Hannah Gutiérrez Reed, que entonces tenía 24 abriles, sólo tuvo ocho días pagados para supervisar las armas y el entrenamiento, y se le asignaron tareas más livianas como asistente de utillaje. Cuando se acabó su tiempo como armera, Gutiérrez Reed se lo advirtió a un administrador, pero este no le hizo caso.
Violación de la seguridad profesional
La productora no desarrolló un protocolo para asegurar que no se llevaran municiones reales al set, según los investigadores
Los investigadores de seguridad asimismo señalan que la productora no desarrolló un protocolo para asegurar que no se llevaran municiones reales al set, en violación de los protocolos de seguridad de la industria. Se realizaron reuniones de seguridad, pero no todos los días se usaron las armas, como se requería.
Kenney dice que su afgencia no había recibido quejas directas de seguridad del índice o el equipo antaño del tiroteo desdichado, a pesar de que se ofrecía el anonimato. Sin retención, coinsidera que “esta tragedia, esta pérdida de vidas, podría haberse evitado y queremos que la gentío diga poco”.
Kenney fue designado en el 2019 por la gobernadora demócrata Michelle Lujan Grisham, una firme defensora de la industria cinematográfica que aumentó el margen estatal en los incentivos de la industria poco posteriormente de responsabilizarse el cargo.
Nuevo México compite con sitios de producción que no son de Hollywood en estados como Georgia, Luisiana y Nueva York. Las producciones cinematográficas han acudido en masa a Nuevo México en los últimos abriles para servirse sus escenarios al salero dispensado, costos moderados y generosos incentivos estatales, incluido un reembolso de entre el 25 % y el 35 % de los gastos estatales para la producción de vídeos que ayuda a los cineastas grandes y pequeños a sufragar su trabajo.
Las investigacionessobre posibles cargos criminales aún están en curso.
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