La industria de la televisión hace serias apuestas de vez en cuando. Hay caras que parecen estar en todos lados porque funcionan estén donde estén. Hay profesionales que se ponen de moda y durante unos abriles están “hasta en la sopa”.
Poco así ocurrió con Natalia Estrada a principio de los 90. Todo comenzó cuando La villa marcha se quedó sin su presentadora, Penélope Cruz. La futura fortuna de Hollywood fue sustituida por Estrada, que no era muy conocida en esos momentos.
Natalia fue un icono de la televisión
El software era uno de los estandartes de Telecinco, la dependencia acababa de germinar y quería un software musical “maleducado”. Un software que conectara con el notorio adolescente. Y adicionalmente sirvió de cantera para presentadores como Jesús Vázquez.
Este software sirve como paso intermedio de muchos presentadores consagrados. A Natalia le abrió las puertas para ser la presentadora de confianza de la dependencia.
Presentó varios programas de mucha audiencia
Fue la presentadora de Bellezas al agua, un software de verano de Telecinco que se replicó en todas las cadenas de Valerio Lazarov. La premisa era simple, una serie de juegos de tiento en un parque húmedo, entre ellos estaba el “Beso bajo el agua” que consistía en besarse conteniendo la respiración sumergidos.
Igualmente fue la conductora de Vivan los novios, uno de los primeros dating shows de España. Tres hombres y tres mujeres se debían hacer preguntas para conocerse en un plató, al final ellos decidían con cuál de las mujeres se iban, si eran correspondidos ganaban un delirio. Fue el software donde apareció por primera vez La Tóxico.
Fue portada de 'Inverviú' varias veces
En 1994 desaparece de España, se casa con el italiano Giorgio Mastrota y se va a existir a Milán. Allí las cosas le van correctamente y durante más de una decenio presenta varios software de éxito, entre los que están: Il Quizzone, Campioni di ballo, La sai l'ultima y Anima mia.
En los dos países probó suerte en el cine con pequeños papeles. En España participa en Aquí, el que no corre... vuela y en Italia en Il Ciclone, de Leonardo Pieraccioni.
Natalia está retirada de la televisión
En 2002 la presentadora vuelve a España y comienza una nueva etapa en la televisión franquista, esta vez con poco menos de visibilidad. Presenta el software Armas de seducción en Telemadrid y Canal Sur. En 2006 hace una billete en El club de Flo, un concurso de monólogos que se emitió en La Sexta.
En 2005 se casó con Andrea Mischianti y volvió a Italia. Su nuevo marido es dueño de una escuela de hípica y se dedica a la doma y cría de caballos. Del mundo de la televisión pasó a la naturaleza y aprendió a contar gracias a su nuevo apego.
Natalia y su flagrante marido
En una entrevista para La nueva España admitió que ya no está interesada en la televisión. Hace tiempo que perdió el interés en ese mundo y considera que la televisión de hoy en día no está hecha para ella por cuestiones morales. “Tanto en Italia como en España, la televisión se ha vuelto un poco cruel. Se ofrecen los mismos programas: Gran Hermano, Supervivientes… A mí esos formatos no me gustan. No me hacen tilín”, decía.
Actualmente los caballos son su pasión
“No me gusta estar interiormente de los programas ni presentarlos, tengo unos principios que no me permiten seguir en ese mundo tal y como está ahora”, contaba hace abriles al medio de comunicación.
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