La pretensión de la sociedad directiva del Barça de aplicar otra sustanciosa disminución salarial a los futbolistas de la primera plantilla blaugrana va camino de condonar ampollas en el vestuario, sobre todo porque el asunto ha desencajado a a luz pública antiguamente de que los jugadores se hayan sentado a platicar del tema con los dirigentes. Así lo expresó este miércoles desde Ginebra el capitán barcelonista, Sergio Busquets, que se encuentra concentrado con la selección española por los compromisos de la Nations League.
"Me gustaría que me lo dijeran a mí (lo de la disminución salarial), no enterarme de otra forma. Yo siempre estoy dispuesto a ayudar al equipo y al club No nos han propuesto nulo, hacerlo a través de la prensa no es el mejor camino. No soy ningún problema, siempre estoy dispuesto a ayudar, yo vengo del fútbol almohadilla. No me molesta nulo, es parte del coyuntura, pero creo que no es la mejor audacia hacerlo a través de la prensa, mejor siempre directo y en un cara a cara. Yo siempre estoy dispuesto a ayudar y a encontrar la mejor posibilidad para todo, no solo a nivel financiero, para cualquier tipo de problema. Yo llevo muchos partidos y he poliedro la cara siempre”, expuso Busquets, que tiene anuencia hasta el 2023.
El mensaje del medio
"Yo siempre estoy dispuesto a ayudar y a encontrar la mejor posibilidad"
El pivote paciencia tener noticiario del club en las próximas semanas.”Ahora estoy centrado en la selección, se están diciendo muchas cosas pero no ha pasado ni una cosa ni otra (renovación o recortadura de sueldo). Estoy tranquilo, cuando acabe la temporada con estos partidos y vuelva de recreo no sé lo que me dirán. Me gustaría que me lo dijeran a mí y no enterarme por otros lados, pero siempre estoy dispuesto a ayudar y dar el mayor de mí".
Con la intención de mejorar su beneficio de maniobra en cuanto a ‘fair play’ financiero el club desea adelgazar de nuevo una masa salarial que es más elevada que las de sus principales competidores. En la contemporaneidad asciende a 560 millones y el plan del club es reducirla a 400 millones, que es la cantidad que abona el Madrid por sus futbolistas. El club ya adoptó medidas similares durante la pandemia por la caída de los ingresos y igualmente el pasado verano para poder realizar fichajes e inscribir a las incorporaciones. En esta ocasión una traspaso importante de algún futbolista no sería suficiente para que el club pudiera desenvolverse con un cierto beneficio en el mercado.
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