La Dirección Militar de Tráfico (DGT) se muestra abierta a implantar en España el carné B1, un permiso de circulación que tiene como fin favorecer el llegada escalonado a la movilidad eléctrica a los jóvenes desde los 16 abriles. Esta medida, propuesta por las organizaciones Pons Seguridad Viario y la Asociación Empresarial para el Ampliación e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive), no es nueva, existe en otros países de Europa, y su implantación en España supondría una modificación del Reglamento Militar de Conductores.
¿Qué es el carnet B1 y en qué se diferencia del AM?
Al adivinar esta aviso, a muchos les habrá venido a la vanguardia la existencia del carnet AM, un permiso que habilita a las personas de a partir de 15 abriles a la conducción de ciclomotores de dos o tres ruedas y cuatriciclos ligeros, que, en nadie de los casos, superen los 50 cc, los 45 km/h de velocidad, ni 425 kg de peso.
A diferencia del AM, el B1 permite a jóvenes a partir de 16 abriles conducir cuatriciclos pesados (categoría L7e), es asegurar, cuya masa en vano sea inferior o igual a 400 kg (550 kg en caso de tratarse de vehículos destinados al transporte de mercancías), sin incluir la masa de las baterías para los vehículos eléctricos, y con un motor cuya potencia máxima sea inferior o igual a 15 kW.
El carnet B1 es una categoría de permiso de conducción contemplada en la Directiva 2006/126/CE. No obstante, en esta no se distingue entre la formación teórica del carnet B y del B1, dejando al criterio de cada país el contenido del examen. Pons Seguridad Viario y Aedive consideran que la formación teórica debe ser equivalente en el caso del permiso B1 o del B, mientras que para el examen práctico sí que es necesario realizar pruebas diferenciadas, transmitido que los requisitos para hacerlo son diferentes en los dos casos.
¿Qué beneficios presenta el nuevo carnet?
Como hemos dicho, este permiso ya ha sido adoptivo y probado con éxito por algunos países como Portugal, Italia, Francia y Reino Unido. Según estimaciones de Pons Seguridad Viario y Aedive en colchoneta a los datos del INE, este nuevo permiso daría la posibilidad de un primer llegada a la movilidad eléctrica a cerca de un millón de personas cada año.
Ambas organizaciones coinciden en que una de las principales ventajas de la implantación del B1 a corto plazo sería el incremento de la seguridad en los desplazamientos, puesto que este permiso permitiría "un llegada racional y escalonado a la conducción de automóviles, y una alternativa de movilidad más segura a los medios de transporte tradicionales", según Pons Seguridad Viario.
Otra de las ventajas del permiso B1 es que el cuatriciclo L7 comparte fundamentos de seguridad con los vehículos de categoría M, el transporte convencional para el transporte de personas. Asimismo, según Pons Seguridad Viario y Aedive, estos vehículos presentan un aspecto fundamental para la seguridad del que no disponen los cuatriciclos de la categoría L6, como es la disposición de estructuras de protección en caso de trastorno (ROPS).
Las entidades asimismo destacan que el carnet B1 contribuiría a mitigar el cambio climático ya que la mayoría de los cuatriciclos pesados son eléctricos, por lo que cumplen los estándares de emisiones europeos y ayudan a cumplir los objetivos del Acuerdo de Paris.
Para el director militar de Aedive, Arturo Pérez de Lucia, el permiso de conducir B1 ofrecería "ventajas importantes para la movilidad eléctrica en España en cuanto a la concienciación”. "Llegará a un manifiesto mancebo que el día de mañana formará parte del tráfico y habrá podido pasar las barreras del desconocimiento actuales en torno al transporte eléctrico, haciendo de este un manifiesto sensibilizado con una conducción competente y segura".
Asimismo, asimismo ha señalado que "permitirá que se desarrollen modelos de negocio basados en la movilidad eléctrica compartida que ofrezcan vehículos más seguros y confortables a un manifiesto mancebo que actualmente solo puede alcanzar al carné de motos A1".
Por final, Pérez de Lucia ha recalcado que esta medida "favorecerá el ampliación industrial basado en esta tipología de vehículos por parte de empresas españolas que buscan desarrollar factorías para producirlos en nuestro país, fomentando la competitividad”.
Aunque de momento la DGT ha dejado la puerta abierta al carnet B1, ha recalcado que esta osadía se tomará “ a medio o a liberal plazo” ya que para su implantación se requiere de una modificación del Reglamento de Conductores.
Este artículo se publicó en La Vanguardia el 23 de Noviembre del 2021
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