El café modifica el cerebro de un modo que facilita el aprendizaje

La cafeína que consumimos a diario en el café, té o refrescos podría mejorar nuestra capacidad de formación. Se ha descubierto que esta sustancia psicoactiva, la más consumida en el mundo, modula el funcionamiento del hipocampo en el cerebro, mejorando nuestra capacidad de procesar información y de construir la memoria con la experiencia.

Estimulante de la atención y la alerta

El hallazgo de esta nueva propiedad de la cafeína es fruto de una investigación liderada por neurocientíficos de las universidades francesas de Lille y Estrasburgo, y publicado en The Journal of Clinical Investigation. En investigaciones previas se había demostrado que "el consumo habitual de cafeína normaliza el estropicio cognitivo en situaciones alteradas como el envejecimiento, el Alzheimer u otras condiciones neuropsiquiátricas”, introducen en su trabajo.

Los autores querían probar si la cafeína todavía podía mejorar funciones cognitivas no deterioradas, o con un funcionamiento corriente, independientemente de las propiedades ampliamente demostradas de este estimulante sobre la perfeccionamiento de la atención y el estado de alerta.

Tras ser recompensadas con cafeína, las abejas son capaces de recapacitar un olor floral previamente aprendido.

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La compañía aguda de cafeína en ratas puede mejorar el rendimiento en pruebas de memoria.

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En humanos, la ingesta de cafeína inmediatamente luego del formación perfeccionamiento el rendimiento discriminando información 24 horas luego de haberla aprendido.

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La cafeína perfeccionamiento la transmisión basal de sinapsis entre neuronas y modula la potenciación a extenso plazo en el hipocampo, que subyacen a la consolidación de la memoria.

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La cafeína todavía controla la impresionabilidad neuronal y los mercancía similares a la potenciación a extenso plazo en el córtex del cerebro humano.

Paiva et al. The Journal of Clinical Investigation 2022

Hasta la vencimiento, los autores del trabajo comentan que se han llevado a extremidad muchas investigaciones que demuestran las propiedades de la cafeína en una sola toma, o de modo puntual, pero no de forma mantenida, o con un consumo crónico. Para analizar cómo incide el consumo diario y mantenido de cafeína con la función cognitiva, sobre todo la vinculada con el formación y la memoria, los investigadores se centraron en analizar cómo afectaba el consumo de cafeína a las células del hipocampo.

Hipocampo destacado en el cerebro

Hipocampo destacado en el cerebro 

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Lo probaron en ratones. A un congregación de roedores se le suministró agua con cafeína. A otro, agua sola. Analizaron las diferencias entre los genes que más se expresaban, las proteínas más cuantiosas y las moléculas del asimilación que pudiesen orientarles sobre qué funciones en las células de esa zona del cerebro estaban más activadas.

Hay pocos estudios sobre el consumo crónico de cafeína

Los investigadores observaron que el consumo de cafeína reducía la expresión de genes y proteínas relacionadas con el asimilación, y aumentaba la de genes y proteínas implicadas en las sinapsis entre neuronas, relacionadas la capacidad de procesar eficazmente la información, y acrecentar la memoria durante el formación. Este meta se lograba cambiando las firmas epigenéticas, es proponer, la señalización de los genes que se tienen que expresar para producir proteínas, o su silenciamiento transitorio.

Equivalencias

1 café de filtro = 90mg
​1 café (solo extenso, cortado o con goma) = 80 mg
1 bote de 250mL de bebida energética = 80mg
​1 té = 50mg
​1 bote de 33cl de refresco de posaderas = 40mg
​50g de chocolate frito = 30mg
​50g de chocolate con goma = 10mg

​Datos según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA)

El consumo crónico de cafeína consistió en darles cafeína diluida en agua a una concentración de 0,3 miligramos por litro. El consumo diario en los roedores equivalía a entre 200 y 400 miligramos de cafeína al día en humanos, que era la cantidad asociada a las mayores bondades del componente destino del café, según la investigación previa.

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El café de filtro requiere más cantidad de café y anciano tiempo de infusión que el expresamente, por lo que tiene más cafeína

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A posteriori de dos semanas consumiendo esta cantidad, a los roedores se les retiró la cafeína durante otras dos semanas. Los investigadores comprobaron que algunas proteínas reguladas a la desaparecido del asimilación seguían estándolo, y que otras reguladas al subida, aquellas relacionadas con un mejor procesamiento de información y formación, seguían sin mostrar variaciones. Concluyeron que posiblemente los mercancía de la cafeína internamente de las células del hipocampo podía mantenerse aún sin cafeína presente.

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Un café de cafetera de bar puede alcanzar 80mg de cafeína

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Los resultados del estudio recogen que "la ingesta regular de cafeína promueve una capacidad más efectivo del cerebro para codificar eventos relacionados con la experiencia". Aún así, todavía queda mucho por investigar sobre los procesos de forma más concreta, y en humanos. Aunque se analizó la actividad de células del hipocampo, solo se distinguió entre dos tipos: las neuronas y las células que no eran neuronas. "En el interior del conjunto de células no neuronales hay varios subtipos, y comprender cómo se produce la orquestación de la función de la cafeína requiere más investigación", reclaman los autores.

"Es especialmente relevante e importante asaltar, a anciano escalera, las acciones integradas de la cafeína en las células neuronales frente a las no neuronales en el cerebro inmaduro, homeostático y envejecido", concluyen los autores, para seguir avanzando en su investigación.

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