Como cada verano, Mallorca se convierte en uno de los destinos de alucinación más populares del mundo. Millones de viajeros llegados de todo el planeta eligen la Isla de la Calma para disfrutar de sus recreo, y es que Mallorca tiene de todo y para todos los gustos: playas espectaculares, naturaleza imponente -su Serra de Tramuntana es patrimonio de la humanidad-, pueblos tradicionales en los que el tiempo parece haberse detenido, una gran ciudad como Palma que es, sin duda, una de las grandes joyas urbanas mediterráneas...
Y, por supuesto, toda una colección de chiringuitos, a cada cual más apetecible, y donde todo -ya sea un cóctel, un refresco o incluso un gall de Sant Pere- sabe y se disfruta mucho mejor cuando está enmarcado por el mar más mágico de todos, nuestro Mediterráneo.
En Mallorca, como la gran potencia turística mundial que es, la ofrecimiento de chiringuitos es amplísima. Podría decirse que casi cada cala -y, desde luego, cada playa-, tiene uno o más; pero asimismo que, en la última período, el concepto de chiringuito tradicional -muy asociado al tapeo, a la paella y el pollo al ast en tribu antiguamente de retornar a sumergirse en la playa- ha evolucionado, como lo ha hecho la isla en todos los aspectos.
Y aunque todavía quedan numerosos chiringuitos tradicionales, sobre todo en las playas más populares, los más espectaculares se han transformado en fotogénicos y sofisticados beach bars y clubs. Lugares de cuidada ornamento, que sacan el mejor partido al entorno -la playa cercana, la luz mediterránea-, con amplias cartas de comida y bebida, instalaciones -spas, camas balinesas-, fiestas temáticas… Lugares ideales para triunfar en Instagram pero, sobre todo, disfrutar a tope, y entre los que destacan estos cinco.
Playa de Ses Covetes (Es Trenc)
S’Embat
Es Trenc es, probablemente, el sitio más idílico de la costa mallorquina. La presión, ejercida durante décadas y que aún continúa, de ecologistas y vecinos, ha hecho que este tramo del costero sur de la isla se haya mantenido a indemne de los desmanes arquitectónicos que han sufrido otras zonas de Mallorca.
Aquí, en la paradisíaca playa de Ses Covetes está el chiringuito S’Embat, que besalamano a sus clientes con su "¡La vida es maravillosa!", y que hace todo lo posible para cumplir el consigna. Es un emplazamiento ideal, con buena música en directo, actuaciones de circo o teatro, fiestas temáticas, cócteles de autor y buena comida: atención a su paella, una de las más logradas de la zona -y resucitadora a según que horas…
Cala Estancia
Puro Beach
Un auténtico oasis de gusto y buena onda, empachado de glamur y multitud con ganas de pasarlo acertadamente: eso es el Puro Beach de Palma, probablemente el chiringuito más insigne de Mallorca (hay otro en Illetes, en el extremo opuesto de la bahía de Palma), y su éxito les ha llevado a expandirse a Barcelona y el Algarve. En según qué momentos del año, aceptar puede ser una tarea poco complicada: la reserva se antoja imprescindible de junio a septiembre, y es habitual que el chiringuito esté reservado por una marca para realizar un evento o una producción periodística.
Una vez allí, es muy popular encontrarse con celebridades de todo tipo y de todo el mundo (desde estrellas de la televisión alemana o de Hollywood a deportistas campeones del mundo, pasando por grandes fortunas). Camas balinesas, spa, 135 hamacas, restaurante, bares, espacio para yoga, tienda… y una espectacular piscina, colgada sobre el Mediterráneo, de la que uno no quiere salir de ningún modo.
Magaluf, Calvià
Nikki Beach
A un paso de Palma, y con vistas a la isla de Sa Porrassa, el Nikki Beach de Palma (parte del hotel del mismo nombre y que replica el maniquí de hotel y beach club en las mejores playas del mundo) es, encima de uno de los mejores chiringuitos de Mallorca, uno de los motores del nuevo Magaluf, la zona de la isla que históricamente ha acogido al turismo más desenfrenado y que, a gran velocidad, se está reposicionando como un destino playero para todos los públicos.
Entre ellos, los clientes del Nikki Beach, a quienes solo se les pide un look playero, abonar la entrada y disfrutar de todo lo que tienen a su disposición: una amplia carta de bebidas, preparadas por camareros de todas las partes del mundo, y la no beocio carta de menús, con especialidades internacionales y guiños a la cocina mallorquina más tradicional. Tratamientos de belleza cercano a la playa, camas balinesas y Nikki Privé, su salón superior, diseñado para espectáculos en directo y eventos privados, son sus mayores atractivos.
Cala Llamp, Port d’Andratx
Beach Club Gran Folies
En un enclave privilegiado -un saliente sobre las aguas de posidonia de cala Llamp, adyacente al Port d’Andratx- está uno de los chiringuitos más elegantes y con más historia de Mallorca, el Gran Folies.
Por sus varios restaurantes y hamacas han desfilado en las últimas décadas desde miembros de la realeza a las mayores fortunas empresariales españolas, encima de prácticamente toda la multitud chic de la isla. Muchas de las bodas más glamurosas de Mallorca se han celebrado en el Gran Folies, y sus fiestas temáticas son un éxito durante todo el año. ¿Lo mejor? La calidad de su cocina y su piscina, ideal para tener lugar las horas muertas con un cóctel -o varios- en la mano.
Cala Deià
Ca’s Patro March
Pero no podemos correr a Mallorca, inspeccionar sus mejores chiringuitos y tener lugar de grande por el que, probablemente, es el ejemplo valentísimo de chiringuito mallorquín tradicional. Tiene todo lo que podríamos esperar de él: construcción sencilla, un enclave espectacular, comida deliciosa, y relax total a la hora de vestir, de ingerir y de disfrutar (¡pero no a la de olvidarse de reservar, o será difícil disfrutar de él!)
Nos referimos al Ca’s Patro March de Cala Deià, textualmente colgado sobre las rocas de cala Deià (una de las más bonitas de Mallorca). Allí, la carta es menos extensa que en sus lujosos compañeros del otro flanco de la isla, pero no menos espectacular en calidad, pescados y mariscos servidos recién capturados (atención al exclusivo a la plancha), verduras, poco de carne… cocina tradicional mallorquina, preparada con mimo y en raciones generosas.
Ingerir en el Ca’s Patro March no puede ausentarse en ningún alucinación a Mallorca, poco que saben acertadamente famosos como Michael Douglas, Claudia Schiffer o Oliver Khan, asiduos visitantes. Y no nos olvidamos de que estamos en un sitio bellísimo, único en el mundo, así que habrá que poner a nuestra comida o cena el colofón valentísimo. Pero, en sitio de hacerlo con un sofisticado cóctel, o un combinado, hagámoslo con unas herbes o un palo, y brindemos, mirando al Mediterráneo, por esta Mallorca tan maravillosa.
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