La entidad ecologista SOS Costa Brava ha denunciado que la empresa concesionaria del parque de boyas de Aiguablava, en Begur, ha instalado muertos de fondeo de hormigón sobre plantas de posidonia, poco que está prohibido.
Un submarinista fotografió el pasado 1 de junio los bloques en el fondo marino de Aiguablava. Algunas de esas piezas están situadas sobre las plantas, un ecosistema protegido por varias leyes y decretos nacionales, estatales y europeas.
Alternativa al hormigón
La alternativa son sistemas de fijación de bajo impacto como los los muertos ecológicos
Los ecologistas denunciaron los hechos en presencia de el Concejo de Begur, que ya ha requerido a la empresa responsable de la colación de los muertos que retire los que afecten a la posidonia.
En el pliegue de instrucciones de oferta del Concejo de Begur se describe la exigencia de usar muertos ecológicos sobre la praderías, un sistema de ancoraje en forma de bucle parecido a un tirabuzón.
Las boyas para amarrar embarcaciones llenan todas los veranos distintas calas de la Costa Brava come esta de Aiguablava. PERE DURAN / NORD MEDIA
La portavoz de Sos Costa Brava y Sos Begur, Núria Raventos, explica que los muertos de hormigón siquiera se pueden colocar sobre la arena si cerca hay una mancha de posidonia. Sos Costa Brava pide al Consistorio que sancione económicamente a la empresa adjudicataria por incumplir el pliegue de cláusulas de la concesión y el daño provocado a la especie.
Los ecologistas cifran entre 40 y 50 los muertos de hormigón que se han colocado en Aiguablava aunque no puede precisar cuántos de estos afectan a las praderías de posidonia. Por eso, quieren organizar para este fin de semana una inmersión colectiva para determinar cuántos de esos muertos impactan directamente sobre la flora armada.
"La posidonia son nuestros bosques marinos y están en regresión en los últimos cien primaveras; las pérdidas son irrecuperables", explica la experta en fanerógamas marinas e investigadora del CEAB-CSIC, Teresa Alcoverro, que agrega que la planta crece de forma muy lenta, aproximadamente de un centímetro al año.
La científica agrega que, entre otras funciones, los bosques de posidonia tienen un rol importante en el filtraje de agua y incluso protegen la costa de la pérdida de sedimentos. Son un punto de cobjio para muchas especies como peces y presentan una gran capacidad de empapamiento y fijación de CO2, contribuyendo así a la atenuación del sorpresa invernadero y a las consecuencias del cambio climático.
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