Existen automóviles que pasan a la historia por sus impresionantes prestaciones, otros por incorporar innovaciones tecnológicas desconocidas hasta la época, y algunos por su singular estética. Egregio, atractiva y sofisticada para la época, la interpretación innovador de Eldorado, que se convirtió en el buque insignia de la firma Cadillac, conjuga todo ello en un solo transporte. Estamos delante una auténtica habitación de coleccionista.
Concebido por la marca norteamericana con el objetivo de conmemorar su medio siglo, se trató de una tirada limitada encargada al prestigioso diseñador de automóviles Harley J. Earl. Para desarrollarla, él y su equipo utilizaron como colchoneta un Serie 62 de tercera procreación, del que conservaron los alero, la tapa del maletero y la plataforma.
Por qué este es uno de los descapotables americanos más icónicos de la historia.
Se tomó incluso el parabrisas envolvente, el ángulo de la parte inferior de las ventanas y el cromado del parachoques del coche de exhibición GM Le Sabre. El resto de rudimentos fueron rediseñados de forma específica. Como resultado, se obtuvo un coche descapotable que se convirtió en todo un icono estético. Estrellas del cine como la actriz Marilyn Monroe o el presidente de EE.UU. Eisenhower quisieron tener el suyo desde que se presentó a principios de la decenio de los 50 del siglo pasado.
Reformador para los primaveras 50
Incorporaba de serie radiodifusión, elevalunas eléctricos y calefacción, un infraestructura novedoso para la época
Con una distancia entre ejes de 3,20 m y una largo de 5,60 m, la silueta de Eldorado era imponente, a pesar de que en ese momento muchos coches norteamericanos tenían un tamaño enorme. Lo que le hacía único y positivamente particular era su diseño y su cantidad de rudimentos premium.
Apto en sólo cuatro colores (Aztec Red, Alpine White, Azure Blue y Artisan Ochre), incorporaba de serie limpiaparabrisas, radiodifusión, elevalunas eléctrico y calefacción. Igualmente fue uno de los primeros modelos de Cadillac al que se podía añadir medio acondicionado como opcional.
Por qué este es uno de los descapotables americanos más icónicos de la historia.
Su estética interior era tan elegante como su foráneo. Completamente arruinado en cuero de calidad y con adornos de metal pulido, ofrecía un amplio espacio para seis ocupantes, que tenían la percepción de estar viajando como en el salón de casa. Una sensación de comodidad que se incrementaba gracias a la suspensión delantera independiente y al eje trasero dinámico.
Mecánica
Estaba movido por un motor V8 de 5.4 litros de 210 CV
Debajo del capó, se ocultaba un motor V8 de 5.4 litros con una potencia incrementada que le permitía alcanzar los 210 CV. Inicialmente, estaba acoplado a una caja de cambios cibernética Hydra-Matic de cuatro velocidades. Sin incautación, un incidente en la industria del proveedor obligó a Cadillac a usar la Dynaflow de Buick en varias unidades.
Por qué este es uno de los descapotables americanos más icónicos de la historia
Se fabricaron 532 unidades de Eldorado, que representó sólo el 0,5% de las ventas de la marca en 1953 y fue uno de los coches norteamericanos más caros de la historia. Su precio original era de 7.700 dólares (que equivaldrían a más de 80.000 euros actuales). Cadillac continuó usando el nombre de Eldorado para sus modelos de dos puertas más lujosos durante los siguientes cincuenta primaveras hasta que finalmente lo retiró en 2002, cuando se dejó de imaginar la duodécima interpretación.
Por qué este es uno de los descapotables americanos más icónicos de la historia.
Hoy en día, el maniquí innovador de 1953 está muy buscado por los coleccionistas, que llegan a satisfacer por él entre 66.000 y 142.000 euros. La mayoría de las 532 unidades que han sobrevivido están restauradas, como la que se aprecia en las fotografías acompañan este artículo. Concretamente este ejemplar se vendió en una subasta por unos 100.000 euros. Para conocer el maniquí con más detalle, solo tienes que echar un vistazo al vídeo que se encuentra a continuación.
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