La protección definitiva del espacio agroforestal de Torre Negra, en el parque de Collserola en Sant Cugat del Vallès, está más cerca. El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) ha rechazado el petición presentado por la constructora Núñez y Navarro –propietaria de una parte de los terrenos– contra la calificación de las 165 hectáreas de este entorno como suelo no urbanizable y da por bueno este ordenamiento urbanístico de la zona que impide construir viviendas. Aunque la inmobiliaria ya ha anunciado que recurrirá la sentencia frente a el Tribunal Supremo, el proceso encara la recta final tras casi 30 abriles de intentos de progreso y protección.
Esta última sentencia confirma la potestad del Consistorio de modificar el Plan Normal Metropolitano (PGM) en Torre Negra para convertir suelo urbanizable no delimitado en suelo no urbanizable ordinario. Esta transformación la aprobó definitivamente la Generalitat en el 2018 y contra ella se presentaron varios posibles, entre ellos el de Núñez y Navarro. “Hemos cedido un paso, que nos gustaría que fuera el definitivo; pase lo que pase, seguiremos comprometidos con la defensa de Torre Negra”, aseguró ayer la alcaldesa, Mireia Ingla. Este era el tercer intento de protección del consistorio, a posteriori de que los tribunales anularan las dos primeras modificaciones al considerar que el espacio no reúne los títulos naturales como para clasificarlos de singular protección.
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