Llevas toda la vida tomando la cerveza a la temperatura equivocada

Si te consideras un buen mamado de cerveza (nos referimos a la calidad y no a la cantidad), pero quieres que te la sirvan, sea el tipo sea, casi helada y en vaso recién sacado del congelador, deberías replantearte tu coito por esa bebida. Cierto que la temperatura es básica en la cerveza, y está acertadamente tomarla incluso por debajo de los 3 grados si es una de esas que se bebe casi de un trago para aplacar la sed en verano.

Pero si se pretende disfrutar plenamente de una cerveza de calidad, especialmente de elaboración artesanal, hay que aprender a qué temperatura tomarla para apreciar los mil y un matices de sabores y aromas que le dan las maltas, lúpulos y demás ingredientes, cuidadosamente seleccionados para ofrecer la mejor experiencia.

El frío puede afectar al esencia y sabor de la cerveza

El exceso de frío disminuye la volatilidad de los componentes aromáticos de esta bebida. Cuanto más fría está la cerveza, menos burbujas desprende y buena parte de los aromas, en motivo de ascender con ellas, se fijan en el puro. De esa forma dejan de revalorizarse por el instinto, al tiempo que provoca un cambio sustancial en el sabor, hasta el punto de convertir una cerveza en una bebida plana, insulsa y sin intensidad.

Es cierto que el frío puede mejorar algunos aspectos, como el amargor, la sequedad y el carbónico, pero puestos a nominar, es preferible la primera opción (poco más de temperatura), porque aromas y sabor son básicos para apreciar una buena cerveza.

Un vaso de cerveza fría 

LV

Si por el contrario se sirve demasiado caliente, sobresalen los aromas y sabores, pero a medida que se va aproximando a la temperatura circunstancia, se va disipando el amargor de los lúpulos y todavía disminuye la cantidad de gas, con lo que siquiera se vive la experiencia tal y como debería ser. 

Cierto que cada uno puede lanzarse si la cerveza le gusta más o menos fría, pero solo tomándola a la temperatura adecuada se apreciarán todas las cualidades que caracterizan esta bebida tradicional. 

No existe una sola respuesta para la pregunta de cuál es la temperatura ideal, porque depende de muchos factores. Uno de ellos y el más importante, es el estilo de cerveza. Otro, la que determina el elaborador que es la mejor para deleitarse con su creación en concreto. Y existe otro creador, este más cultural, que depende de la tradición del motivo donde se tome.

A medida que la cerveza se va aproximando a la temperatura circunstancia, se va disipando el amargor de los lúpulos

En España y en Estados Unidos, por ejemplo, por regla común se prefiere más fría que en Gran Bretaña o Alemania. Si la cerveza se toma en locales dedicados exclusivamente a la cerveza, a veces de las propias marcas artesanales, con camareros expertos, estos seguro que la sirven a la temperatura perfecta. Pero cuando se toman en casa, hay algunos consejos que pueden ayudar a que la experiencia sea más agradable y enriquecedora.

Consejos

🔸 Las Lager se sirven más frías que las Ale.

🔸 Las fuertes requieren más temperatura que las suaves.

🔸 Cuanto longevo es el escalón alcohólico, más caliente debe tomarse.

🔸 Las oscuras se toman más atemperadas que las claras.

🔸 Conviene echarlas en el vaso un poco más frías de lo conveniente según cada estilo para compensar los grados que vayan a triunfar con la temperatura del recipiente y de las manos del camarero, así como del propio tópico.

🔸 Algunos grandes bebedores piden dos a la vez para que mientras toman la primera la segunda magnitud la temperatura ideal. Esto se debe a que la cerveza debe almacenarse en frío y preferiblemente sin que le dé la luz, por lo que a menudo llega a la mostrador con menos temperatura que la ideal para aquel estilo de cerveza.

🔸 Aunque existe un cierto romanticismo sobre la botella de cristal (siempre sombreado), Elliott Konig, regente y socio de Fredo Fox, desmiente que mantengan mejor la cerveza. “Por el contrario, afirma, las latas la preservan mucho mejor porque impiden completamente el paso de la luz, mantienen el frescor más tiempo y resultan más fáciles de acumular y transportar”.

🔸 Si se encuentra demasiado fría, un truco es surtir la botella o la envase unos momentos en la mano para ayudar a que suban los grados.

Temperaturas según cada tipo de cerveza

🔹 En común, las cervezas nunca deberían servirse por debajo de 1 escalón ni por encima de los 12,7.

🔹 Las de poca grado alcohólica y no mucho cuerpo, ofrecen lo mejor de sí mismas entre los 3 y los 7. Incluso las frutales.

🔹 Las Lager ligeras y las industriales son las que admiten las temperaturas más bajas, entre 1 y 4 grados.

🔹 Lo ideal para las Pilsner y las Pale Lagers es de 3,5 a 7.

🔹 Las de trigo, de 4 a 10.

🔹 Las Ipa, las American Pale Ale, Dark Lager, Amber, Vienna, de 7 a 10.

🔹 Porter y Stout, de 7 a 13.

🔹 Desde 8 a 12, las Amber, Belgian Strong, Mild, Brown Ale.

🔹 Entre 10 y 12,5, o temperatura de bodega, es valentísimo para las más alcohólicas y con más cuerpo, como las Imperial de Stout e Ipa, las Strong Ale entre otras.

Este artículo se publicó en La Vanguardia el 6 de agosto de 2021