El incendio de Cures, en Boiro (A Coruña), iniciado en la tarde del jueves, ya ha hasta la coronilla unas 2.000 hectáreas, según la última puesta al día. Asimismo, se mantiene la alerta por proximidad del fuego al núcleo de Piñeiro y el avance de las llamas ha provocado que unas 700 personas hayan tenido que ser desalojadas en Ribeira, la mayoría de ellas se hospedaban en un camping del municipio, donde han ardido algunas roulottes.
El corregidor de esta última asiento, Manuel Ruiz Rivas, ha cubo orden de habilitar los polideportivos para cobijar a los desalojados. Hay accesos cortados y las labores de control han sido muy complicadas por el derrota en las últimas horas, si acertadamente Ruiz ha detallado que "tal y como tira el ambiente" hay esperanzas de que se pueda evitar que el fuego cruce en torno a una zona de masa arbolada que circunda el Hospital del Barbanza.
Además en la provincia de Pontevedra, se registró en la tarde del viernes un fuego en Ponte Caldelas. Las llamas han calcinado ya unas 350 hectáreas y se ha decretado la 'Situación 2' por la proximidad del fuego a las casas de A Canicouva.
Por otra parte, se ha cubo por estabilizado el incendio iniciado el pasado miércoles en la asiento ourensana de Verín que, según las últimas estimaciones, ha calcinado unas 600 hectáreas.
Párrafo de los fuegos en Boiro y Ponte Caldelas, continúa activo el incendio de Caldas de Reis, con 450 hectáreas calcinadas. Encima, se mantienen controlados los de Arbo (Pontevedra) -parroquia de Mourentán y Barcela- y el de la parroquia de Pereiro, en el municipio ourensano de A Mezquita.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ha acudido este sábado al Centro de Coordinación Central de Incendios, situado en Santiago de Compostela, para seguir las labores de terminación de los incendios que siguen activos en Galicia que, en estos momentos, según los últimos datos de la Consellería do Medio Rural, son siete.
"> No Centro de Coordinación Central de Incendios, seguindo os labores de terminación dos lumes que seguen activos en Galicia.
Coma sempre, todo o meu apoio ás persoas que os sofren e aos profesionais que os combaten pic.twitter.com/HvCb2O6x1j
En total, los incendios forestales de esta última semana en Galicia han calcinado unas 4.032 hectáreas.
Castilla y Héroe
Aumenta el nivel de peligrosidad de un incendio obvio en Santa Cruz del Valle
Por otra parte, la Comité de Castilla y Héroe ha elevado el nivel de peligrosidad de 1 a 2 de un incendio en Santa Cruz del Valle (Ávila) por la posible afección a población. Este incendio se declaró a primera hora de la tarde de ayer en esta asiento de 350 habitantes en el sur de la provincia de Ávila, en la comarca del Valle del Tiétar, obligando a suspender las fiestas del municipio.
De acuerdo con la última puesta al día, los medios aéreos de terminación que trabajan para controlar el fuego han pasado de diecinueve a un total de veintiséis, que forman parte de un amplio dispositivo que supera las 400 personas.
La Comité de Castilla y Héroe ha obvio este incendio de Nivel 2, en una escalera de 0 a 3 de peligrosidad, al poder afectar a más de 30 hectáreas arboladas en este oficio del Valle del Tiétar, al sur de la provincia, así como a la población.
El municipio de Santa Cruz del Valle, situado a 73 kilómetros al sur de la caudal, es uno de los parajes de veterano aventura de toda la Comunidad, teniendo en cuenta su riqueza natural y sus elevadas temperaturas, de ahí que se le denomine la Andalucía de Ávila, entre otros motivos.
A finales de julio de 2009, esta zona de la provincia sufrió un gran incendio en el que ardieron 5.000 hectáreas de varios términos municipales y dos personas perdieron la vida. No es el único que ha sufrido esta comarca avilés que históricamente se ha gastado muy afectada por este tipo de siniestros, especialmente el término municipal de Pedro Bernardo, cercano al de Santa Cruz del Valle.
En lo que va de verano, la provincia de Ávila ha sufrido varios incendios, entre los que sobresale el de Cebreros, que arrasó más de 4.200 hectáreas, adyacente al de San Juan de la Nava, en el que ardieron más de 500.
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